El contrato de primer vencimiento para la soja subió 10,4% con respecto a agosto de 2020 y un 13,8% con respecto a septiembre de 2019. Para el aceite de soja, la apreciación fue del 5,6% en septiembre y del 15,6% en el año. En relación a la harina de soja, los precios aumentaron 11,1% en el mes y 10,3% en el año.
La dinámica detrás de la suba de precios de mediados de agosto a mediados de septiembre en Chicago es compleja, pero básicamente refleja un repunte en las compras de China de soja estadounidense y una disponibilidad limitada de suministros exportables desde Sudamérica.
La recuperación de la industria porcina de China de la peste porcina africana ha estimulado las importaciones en 2020 durante los primeros 8 meses de 2020 según el USDA.
La mayoría de estas compras fueron hechas a Brasil, donde las exportaciones a todos los mercados (enero-septiembre) aumentaron un 30 por ciento interanual a un récord de 79,2 millones de toneladas. El fuerte ritmo de las exportaciones de 2020, impulsado por la fuerte demanda de China y un tipo de cambio bajo récord, ha agotado los suministros exportables y se prevé que lleve las importaciones de Brasil a su nivel más alto desde 2003.
En la semana que finalizó el 1 de octubre de 2020, las exportaciones (envíos) acumuladas de soja de EE. UU. a China totalizaron 4,5 millones de toneladas y 1,6 millones al resto del mundo según el USDA.
En consecuencia, los compradores de China se han volcado agresivamente para asegurar la soja estadounidense en los últimos meses. Las ventas sobresalientes a China a mediados de septiembre totalizaron casi 17.0 millones de toneladas, casi igual al récord establecido en 2013.
Las ventas pendientes totales para todos los mercados a mediados de septiembre, incluidos los destinos desconocidos, alcanzaron un récord de 32.0 millones de toneladas, un triple aumento en comparación con 2019 según datos del USDA.
Informe del USDA
La primera parte de la sesión del viernes (9) estuvo enfocada en el informe del USDA y analizar los números finales del informe mensual de WASDE. El mayor interés estuvo en la soja, ya que se esperaba una reducción considerable de las existencias finales de EE.UU. Además, la soja recibió apoyo adicional debido a la demanda creciente.
La compra de los fondos continúa, lo que ha comenzado a ser la tendencia. Esto llevó a la soja a un nuevo máximo contractual y colocó al maíz en su nivel más alto desde febrero pasado. En parte de la fuerza de la soja proviene de los retrasos en las siembras en Brasil y la elevada demanda. Si bien la siembra de soja está comenzando a ponerse en marcha en Brasil y el clima está mejorando y estamos dentro de la ventana de siembra la preocupación principal son menores suministros y oferta de Brasil para el mes de enero y esto ya es una realidad.
Se hicieron cambios más notables en los balances de la soja y el mercado reaccionó en consecuencia. La cosecha de soja de este año en Estados Unidos se estimó en 116,16 millones de toneladas contra a 117,38 millones de toneladas en septiembre. El rendimiento de la soja se mantuvo sin cambios en 34.9 qq/ha (51.9 bpa), pero al igual que con el maíz, tuvimos una reducción del área cosechable. Las existencias finales de soja para la nueva cosecha se estimaron en 7,89 millones de toneladas, una caída del 44,6 por ciento contra el año pasado.
Por el lado del maíz los balances en EE.UU. resultaron principalmente como se esperaba. El rendimiento de maíz se mantuvo casi sin cambios en 112,0 qq/ha (178,4 bpa), pero vimos una disminución del área a cosechar.
En el informe del USDA solo se realizaron cambios mínimos en los balances de trigo en EE.UU. También se realizaron cambios en las estimaciones de existencias finales globales. Las existencias finales mundiales de maíz se proyectan en 300,5 millones de toneladas, 6 millones menos que el mes pasado. Las existencias finales de soja se proyectan ahora en 88,7 millones de toneladas, 4,9 millones menos que hace un mes. Sin embargo, se espera que el suministro mundial de trigo aumente en 2 millones de toneladas, proyectado en 321,5 millones de toneladas.
Algunos datos de China
El gobierno chino también publicó sus balances para la campaña comercial 2020/21. China mantuvo sus balances de maíz sin cambios a pesar de los tifones recientes, con una producción de maíz de 264,7 millones de toneladas y las importaciones de 7.0 millones de toneladas. En este caso el mercado estima que China importaría 16.0 millones de toneladas. La producción de soja la proyectan en 18,8 millones de toneladas y las importaciones se estimaron en 95,1 millones de toneladas. El USDA estimó las importaciones de soja de China en 100,0 millones de toneladas.
Cosechas y clima
Ya publicados los datos del USDA, el mercado vuelve a las actualizaciones de
cosecha y el clima global para seguir con el descubrimiento de precios. Hasta
ahora, la mayor parte de la atención se ha centrado en Sudamérica,
principalmente Argentina pero con atención a Brasil y Paraguay. Dos zonas de
atención meteorológica en este momento son el Mar Negro y las llanuras del sur
de los Estados Unidos, y ambas son factores para el trigo.
Las condiciones secas en las llanuras estadounidenses, pocos en el mercado le están prestando mucha atención. Durante las últimas dos semanas, las llanuras han estado más secas que el promedio de unos años atrás.
Covid-19
Un factor subyacente en el mercado global sigue siendo Covid-19 y su impacto
en la economía global. Algunos economistas creen que el Covid tendrá un impacto
duradero en las materias primas y se va a necesitar ayuda adicional para los
productores. Varias ciudades importantes de todo el mundo están experimentando
un aumento en los casos y ahora están considerando restricciones y posibles
bloqueos. También se piensa durante el invierno del hemisferio norte podría
traer más casos. Si a esto le sumamos la incertidumbre que rodea a las
elecciones presidenciales el 3 de noviembre de EE.UU., es probable que empecemos
a ver a algunos inversores con una tendencia más conservadora en los mercados
hasta el punto que se estabilice la volatilidad.
Por Esteban Moscariello, Ejecutivo Comercial de Díaz Riganti Cereales
Fuente: Centro de Gestión Agropecuaria