El mercado de Chicago volvió, hoy miércoles terminó nuevamente con bajas para los precios de la soja, el maíz y el trigo.
Ante la ausencia de noticias alentadoras por la firma de un acuerdo entre EE.UU. y China, y por la mayor competitividad que ofrecen los abastecedores de América del Sur.
Los futuros de maíz y trigo tuvieron disminuciones por la actitud de los fondos en el día anterior al feriado del día de mañana en EE.UU. Por eso, Chicago tuvo una jornada, digamos, inusual.
En cuanto al mercado doméstico, el precio abierto por compra de soja disponible, estuvo hoy algo más entonado, con un precio de 245 dólares,
La gran incógnita que enfrenta el mercado, y todos los agentes de la cadena agrícola, se refiere a qué nivel de derechos de exportación se aplicará sobre los granos y los subproductos.
En principio, podríamos asegurar que el monto de $4 a descontar del valor del dólar desaparecerá. La intención es eliminar la tendencia a la licuación que este gravamen pesa sobre los productos por cuanto, cada vez que se deprecia nuestra moneda, menor es el porcentaje equivalente.
Pero, simultáneamente, los coeficientes por derechos de exportación se incrementarán.
Lamentablemente, lo previsible es que el nivel de derechos de exportación termine castigando la intención, muy inteligente, de mantener un adecuado plan de rotación de cultivos. De esta forma, el proceso de sojización, parcialmente interrumpido durante los últimos cuatro años, habrá de activarse.
Se dice que la soja tendría una “retención” próxima al 35%. Y los cereales, algo cercano a 20%. Con los actuales precios internacionales y el tipo de cambio de hoy, el negocio agrícola se verá seriamente resentido. Y así todos los eslabones de la cadena, sobre todo los correspondientes a aguas arriba.
El afán de obtener fondos para solventar el problema fiscal es ya más bien un problema de voracidad. La fácil está por ese camino…
Veremos cómo sigue este tema.