La Secretaría de Gobierno de Agroindustria, a través de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario, inspeccionó un acopio de cereales en Los Quirquinchos, Córdoba y 3 arroceras en San Salvador, Entre Ríos, donde se detectaron diversas irregularidades.
En la cerealera cordobesa, ya había sido hallada usurpando la matrícula de un tercero en octubre del año pasado. No habiendo cumplido con la intimación realizada en ese momento, se lo visitó nuevamente y se lo halló acopiando cereales, sin matrícula de RUCA y sin documentación que acredite origen, procedencia y trazabilidad del grano acopiado. El procedimiento incluyó la intimación a descargar un camión que partía de la planta sin papeles y la posterior clausura del establecimiento que derivó en la retención de las más de 1.200 toneladas de cereal halladas en depósito.
Por otra parte, en la localidad entrerriana de San Salvador se visitaron 3 plantas procesadoras de arroz. La primera de ellas presentaba anomalías en la renovación de la matrícula de RUCA y no contaba con ninguna clase de documentación de respaldo del arroz acopiado y procesado. La segunda también se encontraba con problemas matriculares, de trazabilidad y amparo de las operaciones de producción y comerciales. La tercera presentaba serias diferencias entre los libros oficiales. Entre las tres firmas se pusieron bajo interdicción más de 1.000 toneladas de arroz. Se intimó a las tres firmas a regularizar la situación bajo apercibimiento de que les sean suspendidas las matrículas.
Los 4 operativos realizados en industrias y cerealeras del sector granario, arrojan como resultado que más del 80% de la operatoria analizada no poseía registro de trazabilidad porque no se documenta debidamente el grano transportado.
Continuarán los operativos en cosecha con el objetivo de beneficiar a los que cumplen con sus obligaciones comerciales.