CLAAS abrió su nuevo centro de validación en la localidad alemana de
Harsewinkel para el desarrollo de maquinaria agrícola. Accionistas, directivos,
empleados e invitados celebraron la puesta en marcha del edificio en el que se
invirtieron 15 millones de euros, de los cuales 3,2 millones se destinaron
íntegramente a la tecnología de pruebas.
"En mayo de 2017 dimos el primer paso en el desarrollo de este nuevo centro
de validación. Luego de 22 meses, todo está listo y funcionando. Damos las
gracias a todos los que forman parte de CLAAS y también a nuestros proveedores
de servicios", destacó Cathrina Claas-Mühlhäuser, al recordar el inicio de la
construcción.
Con la puesta en funcionamiento de este edificio, CLAAS busca agilizar el
desarrollo de sus cosechadoras, picadoras de forraje y tractores. Cuenta con 13
unidades de prueba para simular las mismas condiciones de cosecha encontradas en
todo el mundo. Mientras que los bancos de prueba a tracción eléctrica funcionan
las 24 horas durante toda la semana.
"Las especificaciones técnicas del edificio son impresionantes", remarcó el
Dr. Thomas Barrelmeyer, responsable de la ingeniería de toda la maquinaria de
recolección de granos. "Por ejemplo, tiene una capacidad de refrigeración
instalada de 1.200 kW. Esto equivale a la capacidad de calefacción instalada de
120 casas unifamiliares", detalló.
Asimismo, con más de 7.000 m² de superficie total, este centro cuenta con
modernas oficinas que albergarán a alrededor de 200 empleados.
"El mayor banco de pruebas es superlativo en términos de ingeniería
estructural en la que se combinan barras de corte de hasta 12 metros de
longitud. La base solamente pesa 600 toneladas, se fundió en una sola pieza en
el lugar y está apoyada por una suspensión neumática. Probablemente sea único en
Europa", aseguró Oliver Westphal, responsable del centro de validación de CLAAS
en Harsewinkel.
El laboratorio de electrónica además permite probar los sistemas de
asistencia al conductor en interacción con los otros componentes. Teniendo en
cuenta que una cosechadora tiene 30 unidades de control, pueden realizarse hasta
50 mil casos de prueba por máquina de forma totalmente automática.
Una vez concluidas estas pruebas, las máquinas quedan listas para trabajar en el campo.