La negociación fue iniciada en respuesta al pedido del sector privado, en junio de 2018. Luego de varios intercambios de información sanitaria, las autoridades keniatas aceptaron el certificado propuesto por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
El secretario de Gobierno de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere, destacó "la importancia de abrir nuevos mercados en un mundo cada vez más demandante de productos de calidad, porque ratifica el rol de nuestro país como un proveedor confiable tanto de alimentos como de conocimiento, innovación y desarrollo agroindustrial".
El ingreso de embriones equinos a Kenia, se suma a la anterior aprobación sanitaria de semen equino y bovino que se logró hace unos meses ampliando el intercambio técnico de nuestro país a través de la exportación de genética hacia el continente africano.
Desde hace diez años, la Argentina mantiene un superávit comercial en su relación con Kenia, sustentado principalmente en los envíos agroindustriales que concentran el 98,82% de los envíos.
Nuestro país exportó 426.320 toneladas de productos agropecuarios por un monto total de USD 83 millones hacia ese destino, donde el trigo acaparó el 90% de los envíos, mientras que el 10% restante se repartió entre maní, maíz, vino y té.
La importancia de Kenia reside en que es la quinta economía más grande en el África Subsahariana y la mayor en el procesamiento industrial. Como la producción tradicional de té, café, flores y frutas tropicales cae en crisis por sequía recurrente deben importar alimentos, y en esas circunstancias Argentina realiza exportaciones de cereales.
La posibilidad de acceder a ese mercado con genética equina abre un nuevo perfil exportador con gran potencial en el desarrollo futuro de intercambio sectorial.