Los transportistas autoconvocados de cereales recurrirán a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para denunciar a los dadores de carga de granos como alternativa al conflicto que se desató a principios de mes, cuando los camioneros mantuvieron una protesta de once días en reclamo por la tarifa que perciben.
El viernes pasado, representantes de los Transportistas de Granos Autoconvocados (TGA) fueron recibidos en el Ministerio de Transporte, según lo acordado dos semanas atrás, para intentar encontrar una solución al reclamo de una tarifa de referencia dados los "frecuentes incumplimientos" de los dadores de carga, según manifestaron.
Desde la cartera de Transporte informaron que la reunión fue en los términos programados. "Se los escuchó, se les dio información de la normativa y los pusimos en contacto con Defensa de la Competencia para que puedan avanzar con sus denuncias", explicaron.
Edgardo Godoy, uno de los transportistas que participó de las reuniones con la cartera que dirige Guillermo Dietrich, explicó a LA NACION: "Nos dijeron que dentro de la ley lo que podemos hacer es denunciar en Defensa de la Competencia y presentar las cartas de porte para comprobar que más allá de que exista libre comercio hay un abuso de parte de las empresas y las multinacionales contra al transporte".
Según informaron los transportistas, mañana a las 11 se reunirán en la Comisión de Defensa de la Competencia para "interiorizarse" y evaluar cómo presentar las denuncias. Además, los representantes que asistieron al encuentro pidieron a los camioneros que recauden información y les envíen las cartas de porte con diferencias de precio como prueba para presentar ante el organismo.
Desde el Ministerio de Transporte explicaron: "Su principal reclamo es que hoy en día la tarifa de referencia no se cumple. La Ley de Cargas lo que establece son herramientas de defensa a la competencia. Se les explicó estos procesos para que puedan tramitar las denuncias que hagan faltan frente a los dadores de carga que no cumplan con la tarifa de referencia".
En un audio que los representantes hicieron circular a los camioneros de granos pidieron paciencia. "Estamos buscando una solución a corto plazo, temporario; a largo plazo estamos tratando de presentar un proyecto de ley en el Congreso", explicaron y puntualizaron: "Vamos a agotar todos los recursos para no llegar a una manifestación".
El 9 de febrero, los Transportistas de Granos Autoconvocados (TGA) decidieron levantar la medida de fuerza que duró once días en gran parte de la región pampeana luego de una reunión que mantuvieron en la cartera de Transporte. Esa mañana, un grupo de cuatro autoconvocados se presentó en el Ministerio con un documento donde constaba que habían concluído la medida de fuerza en las rutas y solicitaban una audiencia con funcionarios.
En el organismo les confirmaron una reunión, que tuvo lugar el viernes pasado, y los autoconvocados dispusieron una "tregua" hasta la fecha del encuentro en Transporte.
El paro de los transportistas de cereales comenzó el 30 de enero. Los camioneros permanecieron en los cruces de rutas de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Chaco y Santiago del Estero, entre otras. La medida de fuerza provocó que los buques en los puertos no pudieran cargar cereal, desbastecimiento en algunas ciudades y denuncias de episodios de vandalismo contra transportistas como la quema de vehículos, rotura de vidrios, descarga del cereal con apertura de boquillas y clavos miguelitos en las rutas. La protesta, además, provocó demoras en los puertos cerealeros y puso en riesgo la producción de aves y de harinas, según advirtieron las cámaras del sector.
En pleno conflicto, el ministro Guillermo Dietrich dijo: "No hay ninguna posibilidad de que el Ministerio de Transporte exija y obligue una tarifa única en todo el país; es inviable". Luego subrayó que tener un precio único requiere de una ley y que depende del Congreso.