La crecida del río Pilcomayo en su cuenca alta en Bolivia y las lluvias intensas siguen amenazando localidades de tres provincias del noroeste del país. Más al sur, en La Pampa, 80 focos de incendio por la sequía en distintos puntos de la provincia quemaron 610.000 hectáreas.
El Comité Permanente de Emergencias de Santa Victoria, Salta, dispuso la evacuación de 10.000 personas ante la posible crecida del Pilcomayo y un agravamiento de las condiciones meteorológicas, según informaron los medios provinciales.
Un temporal de lluvia y granizo en el norte del país hizo desbordar arroyos en Salta, pero también en La Rioja y Tucumán. Quedaron caminos anegados y un alud cortó varios tramos de la ruta nacional 68 en Cafayate.
En La Rioja hubo que rescatar vehículos de los arroyos. "Fue el enero más lluvioso de los últimos siete años -dijo a Radio Latina 101.1 el subsecretario de Emergencias de Salta, Nicolás Kripper-. Cayeron 44 milímetros de agua en muy poco tiempo y eso causó muchas situaciones caóticas en la ciudad de Salta y el interior provincial".
En Tucumán, la crecida del río Colorado, al norte de Famaillá, obligó a bomberos y policías a asistir a un grupo de pescadores. También están afectadas las rutas a Tafí Viejo, El Cadillán, Ranchillos, cerca del río Duraznillo y en Zárate-Las Arcas.
En tanto, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) estimó que en La Pampa se quemaron 608.263 hectáreas por más de 80 focos de incendio ante la falta de lluvias. Dos incendios siguen activos, sobre todo al sur, en Utracán.