El dato es de suma relevancia para el mercado puesto que dicha estimación
incorpora por primera vez en el año encuestas de campo realizadas a farmers de
los principales estados productores. El mercado venía anticipando un recorte de
rindes respecto al mes anterior debido a que la evolución de los cultivos
informada semanalmente por este mismo organismo refleja un deterioro ante la
falta de lluvias en los estados de las Altas Planicies (Dakotas del Norte y Sur,
Nebraska) que está afectando en cierta medida a un estado clave del Midwest como
es Iowa.
La sorpresa vino luego de que el USDA informase que espera un rinde a nivel
nacional de 33,2 qq/ha para la soja estadounidense. Esto es casi 1 qq/ha por
encima de lo estimado el mes pasado y genera confusión en un mercado que de
hecho esperaba un recorte de 32,3 qq/ha a 31,9 qq/ha. El hecho más notable es
que se está informando el mejor rinde de la historia para el mes de agosto (el
record de 35 qq/ha de 2016 no estaba reflejado a esta altura el año pasado)
cuando el ratio de estado de cultivos "bueno a excelente" se encuentra en su
peor nivel desde 2012. Algo similar ocurre con el maíz, donde el mercado
anticipaba un recorte importante desde 107,14 qq/ha hasta 104,3 qq/ha.
Finalmente, el recorte fue de apenas 0,7 qq/ha cerrando en 106,4qq/ha. Aquí
también surgen cuestionamientos de consultores respecto a los supuestos detrás
del cálculo debido a que el estado "bueno a excelente" está entre 10 y 15 puntos
por debajo de años con rindes comparables.
¿Qué significa esto para el mercado? En términos generales, la expectativa de
ver una hoja de balance más ajustada para la soja y el maíz en EE.UU. para la
campaña 2017/18 parece alejarse y ello llega con una baja estacional de los
precios en Chicago de cara a las cosechas gruesas entre septiembre y octubre.
Una falla productiva en dicho país era quizás el principal fundamento para ver
un quiebre de tendencia luego de una excelente performance de Sudamérica.
Recordemos que Brasil tuvo una cosecha record de soja y maíz y esto impacta
profundamente en el comercio de granos ampliando la capacidad de exportación. En
maíz, se espera que nuestro vecino exporte unas 28 MMT mientras que en soja
serían unas 64 MMTs superando a EE.UU. por 4 MMTs.
Mientras tanto, la comercialización en nuestro país se caracteriza por una
alta retención de soja en manos del productor, que ha podido postergar sus
ventas en mayor medida esta campaña. Al momento, resta por venderse un 46% de la
producción 2016/17 en momentos donde prima la incertidumbre por el impacto de
las elecciones sobre el tipo de cambio y la expectativa de cambios en las
retenciones para 2018. El productor local debería pensar qué estrategia seguir
sabiendo que no veremos grandes cambios en los fundamentos de la soja hasta
ingresar en el período de definición de rindes en nuestro hemisferio. Recién en
el verano podremos ver un mercado que brindará nuevas oportunidades de
cobertura, en particular para la cosecha 2017/18 que hoy se negocia en u$s 250/tn
para mayo 2018.
La situación del maíz también merece un comentario debido al fuerte impulso exportador de esta campaña. Según la Bolsa de Comercio de Rosario, las exportaciones de la actual campaña podrían alcanzar las 28 MMTs, un incremento de 6,4 MMTs respecto del año pasado. Para cumplir con dichos embarques, el volumen exportado entre septiembre y febrero de 2018 debería superar en un 70% lo registrado durante el mismo semestre del año anterior. A pesar de ello, debemos notar que la exportación lleva declaradas ventas por 15MMTs, en línea con lo embarcado, hecho que contrasta con la situación del año pasado cuando las ventas superaban en 3,5 MMTs los embarques efectuados. Esto confirma un comportamiento observado en la exportación este año de no generar posiciones vendidas que puedan generarles problemas de logística importantes.
Recordemos que la cosecha de maíz no ha finalizado en nuestro país, restando
levantarse unas 8 MMTs de las 39 MMTs estimadas por la Bolsa de Cereales.
Hace exactamente un mes, mencionábamos en esta columna la posibilidad de
postergar ventas de soja para más adelante, cubriendo tipo de cambio a
noviembre, hecho que arrojaba una soja de $4.700/tn para dicho mes de entrega.
Hoy nos encontramos con un escenario de menores precios en dólares que en aquel
momento pero con una mejora de tipo de cambio que nos sigue brindando la
posibilidad de cerrar una soja a dichos valores para fin de año. Quizás con los
resultados de las elecciones PASO quedará más despejado el panorama para
terminar de decidir, pero luego de las subas en el dólar del último mes las
coberturas en Rofex para los próximos tres meses son sumamente atractivas.
El mensaje al productor es que las últimas noticias que nos llegan del norte no
parecen indicar un problema productivo como el que se anticipaba en los informe
de estados de cultivos y nos estamos acercando a los meses de cosecha en EE.UU.
Este panorama demanda terminar de cubrir los precios de los granos con
herramientas flexibles (PUTS o Ventas + CALLS) antes de que los precios externos
terminen de digerir esta situación.
Por Patricio Lagger; Responsable de Análisis de Mercado en BLD S.A
Fuente: Centro de Gestión Agropecuaria