Pese a las modificaciones anunciadas por el oficialismo, no hubo acuerdo ayer
en la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados en torno a la reforma
del impuesto a las ganancias. El principal punto de conflicto es el piso mínimo
a partir del cual se debe pagar el tributo: el oficialismo no se movió de su
oferta inicial de incrementarlo en un 15% a partir del año próximo, y la
oposición, en forma unánime, lo rechazó por insuficiente.
"El martes próximo nos vemos en la cancha", desafió el presidente de la Comisión
de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Luciano Laspina (Pro), al cerrar el
debate. Para ese día fue fijada la sesión en la Cámara de Diputados y, ante la
falta de acuerdo ayer en la comisión, el final está abierto a lo imprevisible en
el recinto. En efecto, el interbloque Cambiemos, si bien consiguió el dictamen
con más firmas, está lejos de ganar en el recinto con su propuesta por su
condición de minoría. De no acercar posiciones en los próximos días, el
oficialismo corre el serio riesgo de que la oposición -que presentó otros cuatro
dictámenes- haga causa común y le imponga su criterio.
El duelo es protagonizado por dos actores: el oficialismo y el Frente
Renovador, de Sergio Massa, que ayer encolumnó detrás de su dictamen al Bloque
Justicialista, al socialismo y a GEN. Las diferencias giran en torno a dos
cuestiones: una, cuánta gente debería pagar el impuesto.
Segundo, si es menester aumentar impuestos o eliminar exenciones impositivas en
un país agobiado por la presión tributaria para solventar una suba mayor del
mínimo no imponible del impuesto.
El oficialismo, al incrementar en sólo el 15% el mínimo no imponible (que es menor que el índice de inflación proyectada por el Gobierno para 2017), hará que más asalariados se incorporen al pago del tributo el año próximo, advierte la oposición.
Sin embargo, como en paralelo introdujo una profunda reforma en las escalas del impuesto, los contribuyentes pasarán a pagar menos, retruca el oficialismo. Las nuevas escalas irán desde el 5% (hoy es del 9%) hasta el 35% aunque en el caso del trabajador que sea alcanzado con el impuesto en el primer año, tributará el 2,5 por ciento.
"Es una discusión filosófica: o proponemos una ley para que menos trabajadores paguen ganancias o impulsamos otra, como la del oficialismo, para que más asalariados entren en el impuesto, pero pagando poco. Es cierto, pagarán poco, pero lo cierto es que hoy no pagan nada y el día de mañana sí lo harán. Nosotros no estamos de acuerdo con meter más gente en el impuesto a las ganancias", asestó el diputado Marco Lavagna, autor del proyecto del massismo.
El proyecto de Lavagna propone un incremento cercano al 50% en el mínimo no imponible, Según sus cálculos, un millón de trabajadores dejarán de tributar ganancias.
"Es un error de la oposición focalizar la discusión en el mínimo no imponible -retrucó Laspina-. Porque si subimos los pisos mínimos, beneficiaríamos no sólo al trabajador de a pie, sino también a los de más altos ingresos. Eso no es ser progresivo. La progresividad en el impuesto a las ganancias no la da el mínimo no imponible, sino las escalas del impuesto."
El argumento no convenció a los diputados de la oposición. "No podemos acompañar la suba del 15% cuando el Gobierno prevé un aumento salarial del 21% y los convenios colectivos también van a terminar superando esa cifras", explicó Pablo Kosiner (Bloque Justicialista).
Modificaciones
Tal como publicó ayer LA NACION, el oficialismo accedió a incorporar algunos cambios al proyecto que envió el Poder Ejecutivo la semana pasada, aunque sin alterar el mínimo no imponible del impuesto.
Laspina precisó que, con la nueva propuesta, se podrán deducir los alquileres hasta un 40%, aunque con un tope, para que no signifique un subsidio para los alquileres de más alto valor. Además, se restablecerá la posibilidad de deducir al cónyuge del impuesto, que en el proyecto original estaba vedada.
Otro cambio importante es la suba en un 50% del tope de facturación para los monotributistas, lo que generó que la UCR firmara el dictamen en disidencia. "Pretendíamos un incremento del 100%", explicaron desde el bloque radical. Además, con la propuesta oficialista se podrán deducir viáticos, aunque con un tope hasta $ 48.666 mensuales.
Para financiar la merma total, se creará un impuesto al juego, que será indirecto para las apuestas y directo para las máquinas tragamonedas; con este nuevo tributo, el Gobierno espera recaudar unos $ 6000 millones.
Muchas de estas propuestas habían sido sugeridas por el PJ no kirchnerista, aunque el Gobierno desoyó el reclamo de la oposición para que también se graven los plazos fijos y se restituyan las retenciones a la minería.
Trámite legislativo para que los cambios en Ganancias sean ley antes de fin de año
Dictamen en Diputados
El proyecto obtuvo más de un despacho en la Comisión de Presupuesto y Hacienda y quedó listo para ser tratado en el recinto
Diputados
El martes se votará. Primero se buscará una mayoría sobre el dictamen del oficialismo, de mayoría. Por tratarse de la modificación de un impuesto, requiere dos tercios del cuerpo para ser aprobado
Discusión en el Senado
Una vez obtenida la media sanción, el proyecto comenzaría a ser estudiado en la Cámara alta la semana próxima. Podrían introducirse cambios antes de ser votado
Sanción
Tras la obtención de dictamen en el Senado, quedaría en condiciones de ser votado para obtener la sanción definitiva. El oficialismo pretende que se vote el miércoles 14, en sesiones extraordinarias
Las principales iniciativas en debate
Propuesta oficial
En qué cambió
Propone subir el mínimo no imponible del impuesto en un 15%. Así, pasarían a pagar este tributo los asalariados que ganen más de $ 21.712 netos sin hijos y $ 25.231 netos para el trabajador casado y con dos hijos menores. El Gobierno introdujo una importante modificación en las escalas del impuesto, que irá del 5% (hoy es de 9% para el escalón más bajo) hasta el 35% para los ingresos más altos. En cuanto a las deducciones, aceptó reincorporar la deducción por cónyuge, pero mantiene igual la deducción por hijo hasta 18 años (hoy es hasta 24 años). Además, accedió a deducir alquileres (con un tope) y viáticos, y sumó un impuesto a las apuestas y máquinas tragamonedas
El plan de Massa
Un piso más elevado
Propone un incremento cercano al 50% en el mínimo no imponible, con un piso de $ 48.000 en bruto para casados con hijos y $ 34.000 para los solteros. La diferencia sería compensada con la eliminación de distintas exenciones: sobre los plazos fijos superiores a $ 1,5 millones; sobre los rendimientos sobre las Lebac; sobre los rendimientos de fideicomisos financieros y fondos de inversión, y sobre los dividendos de grandes empresas. Además, propone restituir las retenciones a la minería; un impuesto por única vez de 15% sobre la ganancia en contratos de dólar futuro en 2015, y un impuesto a la ganancia extraordinaria sobre el juego
El proyecto K
Sólo los ingresos altos
Propone cambiar el nombre del impuesto por "impuesto a los altos ingresos". Se define un piso de "ingreso mínimo sujeto a impuesto" que corresponde cada año al valor anualizado del salario neto del percentil 90 del SIPA al 31 de diciembre. Si las ganancias netas de las personas resultan inferiores, no quedan comprendidas en el impuesto. En cuanto a la modalidad del cálculo, primero se calcula el monto que correspondería pagar del impuesto según la alícuota que corresponde a la ganancia neta anual y se detraen del impuesto a pagar las deducciones, hasta el límite de hacerlo nulo. Esto hace a las deducciones menos regresivas.