Las empresas hicieron los cálculos en base a la situación de diciembre del año pasado, por lo que su aplicación desde el año próximo implicaría un ajuste mayor.
Más allá de los reclamos de las compañías, el Gobierno tiene la decisión final con respecto a los futuros cuadros tarifarios. Aunque aún no se sabe cuál será el aumento definitivo, se estima que las subas comenzarán a regir a partir del 1° de febrero del año próximo.
El gerente general de Edesur, Juan Carlos Blanco, y el CEO de Edenor, Ricardo Torres, fueron los primeros en hablar entre los 107 expositores anotados. Se esperaban más de 450 oyentes, entre ellos el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien no expondrá durante toda la audiencia.
Blanco propuso un aumento de tarifas del servicio de distribución de 30,7 por ciento en promedio, con alzas del 18 al 53%, dependiendo los clientes.
Por su parte, Torres sostuvo que con la propuesta de Edenor un usuario que consuma 300 kWh por mes pasaría de pagar $ 241 a $ 317, con una variación de 31%.
"Como consecuencia de la propuesta, más del 60% de nuestros clientes residenciales, y a valores del VAD [valor agregado de distribución] ajustados a diciembre de 2016, pagaría un promedio de $231 pesos, con un máximo de $ 343", sostuvo.
Para las pequeñas industrias y comercios, el promedio de aumento sobre las facturas actuales alcanzará el 49% y si se aplicara la fórmula de actualización por variación de costos, sería del 25%.
Otros expositores plantearon críticas. La defensora del Pueblo de la Nación, Mariana Grosso, remarcó que "el servicio se encuentra en un pésimo estado", mientras que su par de la provincia de Buenos Aires, Juan Carlos Tuzzolino, reclamó que el futuro aumento "tenga en cuenta la evolución de los salarios".
Los representantes de las asociaciones de defensa de los consumidores fueron más duros. "Parece que los usuarios tenemos muchas obligaciones y muy pocos derechos", sostuvo el presidente de Adecua, Osvaldo Riopedre. Y Héctor Polino, de Consumidores Libres, sostuvo que "este nuevo aumento que se discute se suma a los ya aplicados y que constituyeron un verdadero tarifazo".
Los intendentes de San Martín, Gabriel Katopodis, y de Esteban Echeverría, Fernando Gray, rechazaron los aumentos.
Gray cuestionó que "los empresarios van todos los años" a su municipio "con los mismos power point, con las mismas inversiones y estamos siempre igual", por lo que "no tenemos inversiones ni del sector privado ni del Estado nacional y eso hace que tengamos innumerables cortes de luz".
En tanto, durante sus 10 minutos de exposición, Katopodis dijo que los municipios del conurbano tienen "angustia" porque ven que "después de la audiencia de gas no ha cambiado nada", por lo que reclamó "certezas en las inversiones" para "tener servicios públicos de calidad".