Después de dos años muy difíciles, las ventas de maquinaria agrícola
crecieron casi un 7% en el primer trimestre de 2016, respecto del mismo período
del año pasado, según el Informe de la Industria de Maquinaria Agrícola que en
forma trimestral publica el Indec.
En total se vendieron 3.004 cosechadoras, tractores, sembradoras e
implementos agrícolas contra 2.811 unidades que se habían comercializado entre
enero y marzo del año pasado (un 6,8% más). Si la cuenta se hace en pesos, la
diferencia es de $ 3.040 millones este año contra $ 1.934 millones en 2015 (un
36% más), pero en esta cifra influye la inflación.
Puede parecer un repunte leve de las ventas y hay que tener en cuenta que se
compara contra uno de los peores años de la historia reciente del sector
fierrero. El 2014 fue todavía peor: apenas se vendieron 2.422 unidades (un 24%
menos que este año). En los años buenos en cambio, por ejemplo el 2008, se llegó
a colocar casi el triple (unos 6.800 fierros en el primer trimestre, según las
estadísticas del Indec).
Pero más que la recuperación de las ventas, que en realidad comenzó a fines
del año pasado -con el cambio de gobierno y la eliminación y quita en las
retenciones-, lo interesante es que hay buenas expectativas y se proyecta un año
mucho más favorable, sobre todo en el rubro de las sembradoras, que viene de un
año que los empresarios califican como “pésimo” (se vendieron unas 1.200, cuando
en otros años los productores y contratistas compraban casi 4.000 unidades en un
año).
En Monte Maíz (Córdoba), Rosana Negrini, presidente del directorio de
Agrometal, le contó a Clarín Rural que estiman que en el 2016 van a fabricar 400
sembradoras. Es casi el doble que el año pasado pero todavía están lejos de los
números de los años “buenos”, cuando la fábrica cordobesa llegó a comercializar
600 equipos.
“Ahora tenemos dificultades porque veníamos trabajando a media máquina los
últimos dos años y hay que poner en marcha de vuelta toda la red de proveedores.
Además volvieron las horas extras y la necesidad de trabajar los sábados. Pero
son problemas lindos comparados con los que teníamos hasta hace unos meses”,
destacó Negrini.
La vuelta al ruedo también genera desafíos financieros para las empresas de
maquinaria agrícola porque hay que pagar los insumos para fabricar los nuevos
equipos con las “flacas” ventas del año pasado y esperar a cobrar las unidades
para recuperar el flujo económico que se necesita para sostener el mayor ritmo
de trabajo en las plantas.
En Rosario, Enrique Negrini, presidente de la fábrica de sembradoras del
mismo nombre, recordó que el buen clima de negocios ya se sintió en Expoagro,
pero lo que pasó es que en abril hubo un diluvio que provocó fuertes pérdidas en
las empresas agropecuarias, sobre todo en Santa Fe, y por eso se postergaron
muchas ventas.
“Hace dos años que veníamos trabajando al 30% de nuestra capacidad y ahora
empezamos a necesitar algunas horas extras y vemos que los productores y
contratistas quieren invertir”, contó el empresario rosarino. “La reactivación
más importante la esperamos a partir de ahora, porque enero y febrero suelen ser
meses de poco movimiento y en abril hubo muchas complicaciones por las intensas
precipitaciones”, coincidió Negrini.
En otros rubros, también se siente el cambio de expectativas. “En cinco meses
del 2016, nosotros vendimos la misma cantidad de unidades que en todo el 2015,
así que tenemos la proyección de duplicar las ventas a fin de año”, indicó Luis
Dadomo, presidente de Metalfor, que fabrica pulverizadoras, cosechadoras y
fertilizadoras, entre otros fierros, en Marcos Juárez (Córdoba).
Dadomo viene de atravesar años difíciles para sostener los turnos de ocho
horas de los más de 550 empleados que la empresa tiene en Argentina y en Brasil
(donde radicó una planta). “Ahora, hay una euforia entre los productores que no
veíamos hace años y repercute en las ventas”, reconoció.
Los créditos para comprar maquinaria, sobre todo los del Banco Nación,
también son una herramienta importante para financiar las ventas, ya que a los
productores les quedan tasas cercanas al 20% -con una inflación que es mayor a
esa cifra- y hay empresas fierreras que les bonifican algunos puntos para
estimular las operaciones.
Según el informe del Indec, en el primer trimestre de este año lo que más se vendieron fueron tractores (952 unidades), implementos agrícolas (1.600), cosechadoras (276) y sembradoras (176). Más del 60% de la facturación la representan las cosechadoras (1.225 millones de pesos) y después vienen los tractores, que generaron ventas por 873 millones de pesos.