La tormenta que seguira instalada hasta el jueves, dejaría entre 70 a 80 mm más. La continuidad del temporal complicaría al sur de Santa Fe, que ya tiene zonas superando largamente los 500 mm en lo que va del año, como Rufino con 640 mm. Este de Córdoba y noroeste de Buenos Aires, también son vulnerables, pero la alerta roja es para el NE de Entre Ríos y sobre todo centro de Santa Fe. Allí, hubo zonas puntuales que superaron los 200 mm.
A pasó más lento de lo que se esperaba, el frente frío y seco no termina de ingresar en la región central, manteniendo el centro de baja presión estable. Esto implica mal tiempo hasta el jueves y lluvias de montos importantes. Hasta ahora, en la región núcleo los máximos lo encabezan Rufino y General Villegas con 140 mm, y General Pinto con 120 mm. Le siguen Álvarez, Santa Teresa, Rojas y Rosario con lluvias de 100 a 110 mm. Las lluvias presentan una heterogeneidad espacial marcada, porque son lluvias que dependen de las condiciones locales. Pero hay algo muy positivo, las tormentas no están siendo acompañadas de eventos violentos, como vientos fuertes y granizo. Y tal vez, lo más importante es que se tratan de lluvias de intensidades moderadas a bajas, que permiten un mejor drenaje y colaboran en no saturar de golpe los suelos. Lamentablemente en el centro de Santa Fe, las lluvias fueron muy voluminosas con picos que superaron los 200 mm y la situación es muy complicada ante este panorama.
Habría una posibilidad de que mejore la situación, si el desplazamiento del frente seco y frío tomara la suficiente fuerza para desplazar al sistema precipitante hacia el Atlántico. Pero, por ahora, no es el escenario más probable. Por el contrario, se espera que la masa de humedad siga prevaleciendo, desplazándose hacia el oeste, acechando con reingresar, otra vez, hacia las zonas castigadas recientemente del centro de Santa Fe.
