SANTA FE.- Tamberos de Santa Fe y Córdoba se declararon en estado de alerta y se movilizarán el lunes en reclamo de medias concretas para el sector que atraviesa una situación crítica. Marcharán a Rafaela, al oeste de esta capital, para exigirle al Gobierno soluciones ante el cierre diario de tambos.

Los productores aseguran que reciben menos del 20% de lo que cuesta la leche en góndola por lo dirigentes del sector le piden al Gobierno que revise la cadena de comercialización. En un encuentro efectuado ayer en Nuevo Torino, una localidad próxima a Rafaela, resolvieron la medida de protesta.

Alrededor de 300 productores participaron del encuentro en el salón social del club Juventud Moderna de Nuevo Torino, con la presencia, entre otros, de Marcelo Aimaro, presidente de la Mesa de Productores de Leche de la Provincia de Santa Fe (Meprolsafe), y Gustavo Prataviera, titular de la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec). También asistieron dirigentes de la Asociación de Productores de Leche de Argentina (APLA), de las Sociedades Rurales de Esperanza y Rafaela y representantes de la Cuenca del Oeste de Buenos Aires.

La asamblea se inició con un informe del diálogo que mantuvieron -un día antes- integrantes de las mesas de productores con el ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile. Durante ese encuentro se solicitó que se extienda por un período indefinido (o hasta que el mercado equilibre los números) el pago de compensaciones, no sólo por los primeros 3.000 litros, sino por el total de la producción. Además, y ante el anuncio de la compra de los sobre stocks por parte del Estado, se puso énfasis en la necesidad de que el dinero que percibirían las empresas baje al productor, aunque se puso en duda la existencia real de dichos sobre stocks dentro de las empresas. Ello, se dijo, será fundamental para evitar el cierre de más tambos.

Los dirigentes mencionaron que Buryaile solicitó un plazo de entre 15 y 20 días para dar una respuesta sobre las diferentes peticiones, algo que los tamberos no están dispuestos a aceptar.

Como se sabe, el consumidor paga $ 15 el litro de leche pero el productor percibe -promedio- $ 2,60.