Los precios de la soja argentina cayeron ayer por segunda jornada consecutiva, en respuesta a las nuevas bajas externas y a la caída de los márgenes de la industria procesadora doméstica, que en los últimos meses viene convalidando valores superiores a la capacidad teórica de pago. El maíz, en cambio, volvió a exponer firmeza, producto de la necesidad de algunos exportadores.
Con escasa presencia de vendedores, en el mercado físico las fábricas
propusieron ayer $ 2150 por tonelada de soja con descarga sobre las terminales
de San Martín, San Lorenzo, Timbúes, Ricardone, Villa Gobernador Gálvez y de
General Lagos, $ 50 menos que anteayer. Así, en dos ruedas la oleaginosa perdió
un 6,5% de su valor, desde los 2300 vigentes el martes.
No obstante dicho retroceso, el precio ofertado por los compradores quedó muy
por encima de los 2009 pesos por tonelada, que ayer fue el valor FAS teórico
fijado por el Ministerio de Agricultura de la Nación. Para la rueda de hoy, el
organismo calculó en 2039 pesos el indicador que marca la capacidad de pago de
la demanda.
Para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea, donde los exportadores suelen completar sus envíos, la soja se mantuvo estable, en 2180 pesos por tonelada.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y
mayo de la soja retrocedieron US$ 3,30 y 1,50, mientras que sus ajustes fueron
de 239 y de 225,40 dólares por tonelada.
Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer quitas de US$ 1,01 y de 0,92 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 322,89 y de 323,44 dólares por tonelada. La previsión de lluvias sobre las principales regiones agrícolas de Brasil, donde avanza la siembra, fue el principal fundamento bajista para las cotizaciones de la oleaginosa.
Hasta tal punto la atención del mercado está centrada ya sobre Sudamérica, que pasó casi inadvertido el informe semanal sobre las exportaciones estadounidenses, en el que el USDA relevó ventas por 2.087.400 toneladas de poroto de soja, por encima de las 2.030.800 toneladas del trabajo anterior y del rango previsto por el mercado, de 1,6 a 2 millones de toneladas.
Respecto del maíz argentino, ayer los exportadores pagaron $ 1150 por tonelada de cereal disponible para las terminales de Arroyo Seco, San Martín, Ramallo y de Bahía Blanca, $ 50 más que anteayer. Este valor superó el FAS teórico, que fue fijado en $ 1090 por Agricultura. Para la rueda de hoy, el indicador fue calculado en 1105 pesos.
El maíz de la próxima cosecha se mantuvo estable, dado que la demanda volvió a proponer 145 dólares por tonelada para la zona del Gran Rosario y para Bahía Blanca.
La contracara para el maíz fue el Matba, donde las posiciones diciembre y abril del maíz perdieron US$ 1 y 0,20 al terminar la rueda con ajustes de 133 y de 145 dólares.
Tras dos ruedas negativas, el maíz se negoció en alza ayer en Chicago. En efecto, los contratos diciembre y marzo del cereal sumaron US$ 1,58 y 1,48, en tanto que sus ajustes resultaron de 149,60 y de 153,44 dólares por tonelada.
El informe semanal sobre las exportaciones estadounidenses fue el principal factor alcista. En él, el USDA relevó negocios por 708.800 toneladas de maíz, por encima de las 248.000 toneladas del segmento anterior y del rango calculado por los operadores, de 300.000 a 500.000 toneladas.
En cuanto al trigo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó ayer que los molinos pagaron entre $ 1250 y 1800 por tonelada, según calidad, procedencia y forma de pago.
Por trigo de calidad (ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína) los exportadores volvieron a ofrecer $ 1450 para Bahía Blanca y $ 1300 para San Martín. El rango para el cereal condición cámara pasó de 1030/1050 a 1000/1030 pesos.
El trigo nuevo de calidad se mantuvo en 145 y en 140 dólares por tonelada para Bahía Blanca y para Rosario, mientras que el grano condición cámara lo hizo a US$ 135 para febrero. En el Matba, las posiciones enero y marzo subieron US$ 2,50 y 2,20, en tanto que sus ajustes fueron de 156 y de 170 dólares.
Progresa la siembra en la zona núcleo
La Guía Estratégica para el Agro (GEA), dependiente de la Bolsa de Comercio de
Rosario, relevó ayer un avance de la siembra de soja sobre el 11% de la
superficie prevista para la zona núcleo, con un progreso semanal de 6 puntos.
"Falta humedad superficial en el norte y en el este de la región. Allí sólo se
comenzó a sembrar en los lotes con cobertura (rastrojos de gramíneas) que
presentan mejores condiciones para la siembra", advirtió la entidad en su
reporte.
Y agregó que se necesitan precipitaciones en torno de los 30 milímetros para que la siembra fluya cómodamente. "Las lluvias también son necesarias para terminar los controles de presiembra, en tanto que los primeros lotes sembrados con la oleaginosa están emergiendo normalmente", destacó.