En plena cosecha y con la carga de un abundante volumen de existencias, la soja estadounidense subió ayer poco más del 1 por ciento en la Bolsa de Chicago gracias al impulso aportado por el valor del aceite, que se negoció con una mejora del 1,8 por ciento tras la confirmación de dos nuevas ventas estadounidenses.

Al cierre de los negocios, las pizarras mostraron alzas de US$ 3,40 y de 3,13 sobre los contratos noviembre y enero del poroto de soja, cuyos ajustes resultaron de 332,63 y de 334,19 dólares por tonelada. Por su parte, la posición diciembre del aceite aumentó US$ 11,46, al pasar de 631,84 a 643,30 dólares.

En el inicio de la jornada, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) confirmó la venta de 20.000 toneladas de aceite de soja a China y de otras 20.000 toneladas a un destino no especificado (se trataría de la India, según fuentes del sector).

Al impulso alcista propio de estas operaciones, por un volumen total poco habitual para una sola jornada, se sumó ayer el aumento del valor del aceite de soja en la Bolsa de Rotterdam, referente global para el precio de los aceites vegetales. En esa plaza, el subproducto trepó un 2,24% y se cotizó a 759,90 dólares por tonelada. Entre las razones que originaron la suba en el mercado europeo se destacó la previsión de una menor producción de aceite de palma en Indonesia (es el principal productor mundial), producto del tiempo seco característico de un "año Niño".

Para el valor del poroto de soja la corriente alcista fue limitada por el avance de la siembra en Brasil y por las proyecciones que ubican la cosecha de ese país por encima de los 100 millones de toneladas (como se amplía por separado). Ayer, la firma brasileña Agroconsult indicó que las tareas de siembra progresaron sobre el 14% del área prevista, con un adelanto de 3 puntos porcentuales frente a igual momento de 2014.

La depreciación del real frente al dólar (cuarta jornada consecutiva), que llevó la relación entre ambas monedas de 3,904 a 3,945, también limitó las subas del valor de la soja en Chicago, dado que le resta competitividad a las exportaciones estadounidenses.

En el mercado disponible local la soja se mantuvo con valores estables, dado que las fábricas volvieron a pagar en forma abierta $ 2200 por tonelada de soja para las terminales de San Martín, San Lorenzo, Ricardone, General Lagos, Villa Gobernador Gálvez y de Timbúes. Un comprador más necesitado de mercadería convalidó hasta 2225 pesos.

Por cuarta jornada consecutiva, para los puertos de Bahía Blanca y Necochea los compradores ofrecieron 2150 pesos por tonelada de soja con entrega inmediata.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la soja sumaron US$ 1,70 y 1, mientras que sus ajustes fueron de 238,90 y de 221,70 dólares.

Cereales con mejoras

La firmeza del mercado físico estadounidense, con comerciales que intentaron concretar compras de ocasión y vendedores reacios a convalidar los precios actuales, fue el principal fundamento alcista para las cotizaciones del maíz en la Bolsa de Chicago. En efecto, los contratos diciembre y marzo del cereal sumaron US$ 1,57 y 1,18 al terminar la rueda con ajustes de 149,89 y de 153,63 dólares.

A la corriente compradora de los comerciales se sumaron los fondos de inversión, que adquirieron unos 9000 contratos de maíz, equivalentes a poco más de 1,14 millones de toneladas.

En la plaza doméstica los precios del maíz se mantuvieron sostenidos, dado que los exportadores pagaron $ 1100 por tonelada para Bahía Blanca y $ 1030/1050 para la zona del Gran Rosario. En esta última región, las operaciones con entregas diferidas se acordaron en US$ 120 para diciembre; US$ 122 para enero, y en US$ 125 para febrero.

El maíz de la próxima cosecha se mantuvo estable, en US$ 130 para la zona del Gran Rosario y para Bahía Blanca. En el Matba, las posiciones diciembre y abril subieron US$ 0,50 y 0,70, mientras que sus ajustes fueron de 136,50 y de 133,50 dólares.

Acerca del trigo, el contrato diciembre en las Bolsa de Chicago y de Kansas aumentó US$ 1,29 y 1,46, en tanto que su ajuste fue de 181,79 y de 176,55 dólares por tonelada, respectivamente. Entre los fundamentos que alentaron la suba se encontraron los dichos del ministro de Agricultura de Ucrania, que advirtió que la superficie sembrada con trigos de invierno podría caer de 6,2 a 5,5 millones de hectáreas y que los rindes se verían afectados por la falta de humedad en algunas zonas agrícolas.

En sintonía con la soja y con el maíz, el mercado doméstico de trigo no evidenció cambios. Para la zona del Gran Rosario, los exportadores ofrecieron $ 1350 por trigo de calidad y $ 1000/1020 por cereal condición cámara. El trigo nuevo de calidad se cotizó a US$ 145 para Bahía Blanca y a US$ 140 para Rosario, en tanto que para la misma zona el grano condición cámara lo hizo a US$ 130. Por último, los molinos ofrecieron entre 1100 a 1450 pesos por tonelada de trigo.

Todos, arriba de los 100 millones para Brasil

qLa agencia Reuters difundió ayer tres nuevas estimaciones sobre la cosecha de soja 2015/2016 en Brasil, cuyo común denominador fue que todas las cifras previstas quedaron arriba de los 100 millones de toneladas, frente a los 96,20 millones recolectados en el ciclo anterior.

qEl dato más optimista lo aportó Lanworth, la división de análisis sobre materias primas de Thompson Reuters, que proyectó la cosecha brasileña en 101,80 millones de toneladas, levemente por encima de su anterior cálculo, de 101,60 millones.

qPor su parte, la brasileña Agroconsult estimó un volumen de 100,60 millones de toneladas y agregó que la superficie destinada a la soja en la nueva campaña será de 33,1 millones de hectáreas, un 3,3% mayor a la implantada en el ciclo 2014/2015.

qSegún el análisis de AGR Brasil, la producción de soja será de 100,50 millones de toneladas, un volumen que quedó por encima de los 98,40 millones previstos por esta firma en agosto pasado.