La soja se negoció en baja ayer en la Bolsa de Chicago y completó una semana negativa para sus cotizaciones, que no lograron reponerse tras el informe mensual publicado el miércoles por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), en el que elevó los volúmenes de la cosecha y de las existencias finales estadounidenses, cuando todos esperaban recortes por los excesos de lluvias que afectaron los cultivos durante la segunda mitad de junio y los primeros días del mes pasado.
Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras mostraron bajas de US$ 5,33 y de 3,86 sobre los contratos agosto y noviembre de la soja, cuyos precios resultaron de 359,54 y de 336,76 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones perdieron un 3,02 y un 4,85% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 370,75 y de 353,94 dólares.
Para la soja, el escenario bajista semanal tuvo múltiples fundamentos: el informe mensual del USDA antes referido, en el que el organismo estimó la cosecha y las existencias de soja estadounidense en 105,73 y en 12,78 millones de toneladas, contra los 101,35 y los 8,19 millones esperados por el mercado; las tres sucesivas devaluaciones del yuan en China entre el martes y el jueves, que abrieron un interrogante sobre el poder de compra del principal polo de demanda global, y el clima que, pese a la especulación sobre el posible impacto negativo del tiempo caluroso que precedió a las lluvias, aún no complicó el estado de los cultivos en la forma en que lo esperaban los fondos de inversión. Sobre este último punto, para mediados de la semana próxima se prevén lluvias sobre la zona productora de granos gruesos.
Para el informe semanal sobre la condición de los cultivos que el USDA publicará pasado mañana, los operadores prevén una caída del 1% en la proporción de soja en estado bueno/excelente, que el lunes pasado quedó en el 63 por ciento.
En el mercado doméstico, las fábricas volvieron a ofrecer $ 2000 por tonelada de soja para las terminales del Gran Rosario, un valor que si bien quedó otra vez por encima del FAS teórico, que fue fijado en $ 1942 por tonelada por el Ministerio de Agricultura de la Nación, resultó inferior a las expectativas de los vendedores. Las mejores propuestas las hizo la exportación que pagó hasta $ 2050 por tonelada de la oleaginosa. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) relevó operaciones por 10.000 toneladas, por debajo de las 25.000 toneladas de la rueda anterior.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones septiembre y noviembre de la soja retrocedieron US$ 1,50 y 1,70, mientras que sus ajustes fueron de 228 y de 232,30 dólares por tonelada.
Respecto del maíz, en Chicago los precios quedaron casi sin cambios, dado que los contratos septiembre y noviembre del cereal sumaron apenas US$ 0,10 al cerraron con ajustes de 143,30 y de 147,83 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones resignaron un 2,34 y un 2,14% frente a los valores vigentes el viernes pasado, de 146,74 y de 151,07 dólares.
Al igual que la soja, el maíz tuvo como principal fundamentos bajista el informe de oferta y demanda de granos que el USDA publicó el miércoles pasado, en el que proyectó la cosecha y las existencias estadounidenses 2015/2016 en 347,64 y en 43,53 millones de toneladas, contra los 338,52 y los 36,17 millones esperados por el mercado.
En la plaza local, los exportadores ofrecieron $ 900 por tonelada de maíz para Bahía Blanca, $ 50 más que anteayer. La BCR indicó que para General Lagos, Timbúes y para San Martín los compradores iniciaron la rueda con una propuesta de $ 880, pero que debieron elevarla a $ 900 -el mismo nivel que el jueves- para interesar a los vendedores. La entidad agregó que por mercadería con entrega en diciembre pagaron $ 950 y $ 980 por entregas entre enero y febrero. Cabe destacar que en todos los casos, las propuestas de la demanda quedaron por debajo de los $ 1007 fijados como FAS teórico por Agricultura.
En el Matba, las posiciones septiembre y abril del maíz sumaron US$ 0,40 y 0,50, mientras que sus ajustes fueron de 100 y de 120,50 dólares por tonelada.
Acerca del trigo estadounidense, el contrato septiembre en Chicago y en Kansas sumó ayer US$ 1,11 y 1,65, en tanto que su ajuste fue de 186,02 y de 179,95 dólares por tonelada. Pese a esta mejora, en el balance semanal el cereal retrocedió un 0,83 y un 0,66% frente al valor vigente el viernes anterior, de 187,58 y de 181,15 dólares por tonelada, respectivamente.
En el mercado local, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos ofrecieron entre 1000 y 1830 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.
Los exportadores ofrecieron $ 1000 por tonelada de trigo disponible condición cámara para la terminal de San Martín, mientras que asignaron $ 1050 por mercadería para el mes próximo. El trigo de calidad se cotizó a US$ 155 en Bahía Blanca y a $ 1300 en Rosario.
En el Matba, la posición enero del trigo bajó US$ 0,50 y terminó la rueda con un ajuste de 137,50 dólares por tonelada, en tanto que el contrato marzo se mantuvo estable, con un valor de 148,30 dólares.