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Un lugar de privilegio en la lista de diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires y una candidatura a vicegobernador bonaerense son los mayores logros que se anotó el sciolismo en una jornada que fue a pura negociación.

Con la tranquilidad que les dio la confirmación en la semana de que tenían el premio mayor asegurado -Scioli fue coronado como el heredero de la presidenta Cristina Kirchner-, en el sciolismo resaltaron la presencia del intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, en una de las fórmulas bonaerenses -será vicegobernador de Julián Domínguez- que pelearán por la sucesión del mandatario bonaerense.

La otra figura que alcanzó un lugar de preeminencia fue la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez. La sobrina nieta de Eva Perón quedó segunda, detrás de Eduardo "Wado" de Pedro -secretario general de la Presidencia y referente de La Cámpora-, en la lista de candidatos a diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires.

Un escalón más abajo aparece Gabriel Mariotto. El vicegobernador, que pasó del kirchnerismo extremo al sciolismo más furioso, quedó como primer aspirante a diputado del Mercosur (Parlasur) en la boleta bonaerense.

"Nuestro cierre de listas fue el martes, cuando se oficializó a Scioli como único candidato a presidente por el oficialismo", aclararon fuentes cercanas al gobernador.

Además de estos tres, desde el sciolismo destacaron la presencia de "muchos" intendentes, legisladores provinciales -Alberto De Fazio- y concejales en todo el territorio. Pese a la magra cosecha, en todo momento desde las oficinas del Banco Provincia intentaron mostrar tranquilidad.

"Somos todos lo mismo, todos oficialistas. Fue el cierre de listas más tranquilo de la historia", aseguró una fuente que estuvo presente en las conversaciones.

"Muchos de los que están en las listas van a estar en el Poder Ejecutivo cuando Daniel gane", explicó uno de los hombres de consulta de Scioli. Como ejemplo, se refirieron al ministro de Salud, Alejandro Collia, que quedó segundo en la lista de concejales en Tres de Febrero, pero que es número puesto para ocupar el Ministerio de Salud en un eventual gobierno del mandatario provincial.

Otros, en cambio, reconocieron que fueron escasos los sciolistas puros que accedieron a las nóminas. "Era lógico, no teníamos muchos candidatos", reconocieron fuentes cercana al gobernador.

Las negociaciones entre el sciolismo y la Casa Rosada, que llevaron varias semanas, estuvieron a cargo de De Pedro y el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, que ayer estuvo todo el día en la Casa de Gobierno.

Pero no se trata de algo nuevo. La historia se repite. Como sucedió con Néstor Kirchner en 2003, ahora le tocó a Scioli ser testigo de cómo otros armaron el grueso de las listas que lo tendrán a él en lo más alto de la boleta. En aquel entonces, por pedido del entonces presidente Eduardo Duhalde, el encargado de armar las nóminas fue Juan Carlos Mazzon; el "Chueco", operador histórico del peronismo y principal armador electoral del kirchnerismo, salió eyectado del gobierno nacional en marzo tras dejar fuera de las listas a La Cámpora en Mendoza.

Ayer, en tanto, el gobernador se volvió a mostrar con su compañero de fórmula, Carlos Zannini. Junto a la jefa del Estado estuvieron en el acto por el Día de la Bandera, en Rosario..