Por la crisis en las economías regionales, desde el tabaco en el NOA hasta las peras y manzanas en el Alto Valle de Río Negro, hay 1,5 millones de puestos de trabajo en riesgo. Así lo advirtieron ayer en Salta la Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y Coninagro en un acto por el cierre del paro de comercialización por tres días.
En la sede de la Sociedad Rural de Salta, ante más de 300 productores de esa provincia, Jujuy y Tucumán, además de representantes de partidos políticos de la oposición, los dirigentes evaluaron como "contundente" el acatamiento al cese de comercialización.
En el Mercado de Hacienda de Liniers, ayer los ingresos de animales volvieron a ser nulos. En tanto, en el mercado de granos de Rosario la operatoria fue escasa. Entre el miércoles y ayer, por esa plaza se negociaron 30.000 toneladas de maíz, por debajo de las 100.000 toneladas de miércoles a viernes de la semana pasada. En soja hubo negocios, entre el miércoles y ayer, por unas 40.000. Se trata de unas 20.000 toneladas menos que en el mismo período de la última semana.
"El paro fue contundente. Fue una medida para poner en agenda lo que pasa en las economías regionales", dijo Luis Miguel Etchevehere, presidente de la Rural, que encabezó la asamblea en Salta junto con su par de CRA, Rubén Ferrero. El presidente de Coninagro, Egidio Mailland, no pudo asistir al encuentro debido a un problema familiar.
Ayer, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, subrayó que la medida de fuerza "no tuvo ningún tipo de trascendencia".
Etchevehere le respondió al funcionario: "Si tuvo que salir a hablar el jefe de Gabinete quiere decir que al Gobierno le molestó. Más que un ministro opinólogo necesitamos un ministro que se ocupe de resolver los problemas de todos los argentinos y del campo en este caso".
También el presidente de CRA le contestó al jefe de Gabinete. "El Gobierno continúa sin reconocer lo que pasa en la Argentina porque vive enfrascado en su propio relato. El acatamiento fue amplio porque fueron los mismos productores los que lo solicitaron", afirmó.
Los dirigentes anticiparon que se encontrarán con productores en Mendoza, Río Negro, Entre Ríos y Buenos Aires en las próximas semanas. Pasado mañana, Ferrero estará con inundados en Bandera, en la provincia de Santiago del Estero.
Dificultades
En la asamblea de ayer, se escucharon duros testimonios sobre las economías regionales. En el caso de Salta, por el poroto, el tabaco y también con cultivos como el maíz, cuyo costo del flete a los puertos se lleva el 60% de su precio. "Las economías regionales están en un pésimo momento. Hay más de 1,5 millones de puestos de trabajo en peligro porque las economías regionales están agonizando", expresó Etchevehere.
Atraso cambiario, cierre de mercados, suba de costos, entre otros factores, pusieron en jaque a las diversas producciones del interior del país.
En el encuentro de ayer se comentó que productores que están cosechando uva en la zona de Cafayate están recibiendo cheques por su mercadería para cobrar recién en febrero de 2016.
En el caso del tabaco Virginia, de Salta y Jujuy, un condicionado acuerdo entre productores y acopiadores estableció una suba de 10% respecto de la campaña pasada que no cubre el incremento de los insumos. Pero se alertó que por la producción con calidad se está pagando menos que el año pasado.
"La gente está preocupada porque todas las actividades están con renta negativa", indicó Ignacio Lupión, presidente de la Sociedad Rural de Salta.
Los tamberos también se sumaron al paro suspendiendo las entregas a las industrias. "Salvo en las zonas inundadas [exceptuadas de la medida] entre un 60 y un 65 por ciento de los productores no entregó la leche", contó Carlos Brave, coordinador de la Mesa Nacional de Productores de Leche. Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera, dijo: "Las entregas fueron normales, no hubo grandes solicitudes de modificaciones en los programas de entrega".