Las fuerzas contrapuestas: firme demanda y cosechas abundantes de EEUU y de Sudamérica, otorgan gran volatilidad al mercado.
La soja comenzó en baja ya que entró al mercado internacional harina de soja proveniente de Sudamérica. Recordemos que durante octubre el precio de este producto subió más 35% impulsado por los problemas de logística en Estados Unidos que se dieron en momentos en que la demanda tomó mucha fuerza, ejerciendo presión sobre las cotizaciones (y arrastrando al precio del poroto). Hoy sucede lo contrario, ya que comienza a aparecer en el mercado internacional harina de soja sudamericana para abastecer al principal consumidor, la Unión Europea, que entra en competencia directa con la estadounidense, por lo que los precios en Chicago ya no encuentran esa presión. Durante la semana pasada corrió el rumor de que Europa estaba cancelando embarques de Estados Unidos para comprometerse con brasileros, mientras que en esta semana el cambio de destino era favorable para Argentina.
Otro factor que contribuyó a la caída de la soja al inicio de la semana fue el gran avance de la siembra en Brasil. Según la consultora AgRural, se lleva implantado a nivel nacional el 63% de la superficie estimada para esta campaña, con un impresionante avance de 17 puntos porcentuales, que logra borrar gran parte del atraso interanual, que hoy se ubica en sólo 6 puntos porcentuales, cuando la semana pasada se encontraba arriba de los 13 puntos. Este retraso tiene que ver con que el centro-oeste sufrió un prolongado período sin lluvias durante inicios de octubre, que llevó a los productores a paralizar completamente las tareas de siembra. En Mato Grosso, el principal estado productor de soja de Brasil, la siembra avanzó 20 puntos durante la semana pasada y ya cubre el 82% del área prevista (8,8 millones de hectáreas), contra el 91% vigente a igual fecha de 2013. En Paraná se implantó el 76% de la superficie, por debajo del 84% sembrado un año atrás.
En lo que tiene que ver con nuestro país, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires confirmó su estimación de área de soja en 20.6 mill de has para la campaña que comienza, lo que representa un aumento de 3% respecto al año pasado. Indicó también que el avance intersemanal fue de 13.5% lo que permite alcanzar una superficie cubierta de 6.24 mill de has (el 30.4%).
Promediando la semana, las bajas de la soja encontraron freno por la firme demanda. Si bien el dato semanal de exportaciones de poroto resultó por debajo de las expectativas, lo cierto es que a once semanas de haber comenzado la campaña (tener en cuenta que son 52), Estados Unidos ya lleva comprometido el 81% de las 46.3 MMT que estima el USDA, superando ampliamente el promedio de los últimos cinco años que se ubica en torno al 63%. Sumado a esto, el USDA informó compromisos de harina de soja por 265.000 tns, cuando se esperaban apenas 150.000 tns y muy por encima de las 21.300 tns informadas la semana pasada.
Por otra parte, el maíz cierra la semana neutral impulsado por la firme demanda en Estados Unidos. Sin embargo cualquier ganancia observada rápidamente se diluye por la venta de contratos por parte de los fondos especulativos.
El USDA anunció el día jueves que durante la semana pasada el país del norte había comprometido un total de 908.700 tns, cuando se esperaban 400.000 – 700.000 tns. Al momento, se lleva comprometido el 43%, por debajo del 51% del promedio de los últimos cinco años.
A nivel local, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvió a resaltar en su informe semanal una caída de 21% del área destinada a maíz, estimándola ahora en 3 mill de has y que esta campaña habrá un vuelco hacia las siembras tardías en el mes de diciembre, dado que el productor busca obtener una estabilidad en las productividades, sumada la gran incertidumbre que existe a la hora de decidir incorporar el cereal en su planteo. La relación a nivel nacional sería del 45% en siembras tempranas y el 55% restante de lotes tardíos o de segunda ocupación.
A la fecha se lleva sembrado el 40,2% de la superficie, registrando 1,5 puntos porcentuales de avance intersemanal. Esto se debe a que aún no se ha comenzado a incorporar el grueso de las siembras tempranas en el NOA y el NEA, las cuales darían inicio en las próximas semanas
El trigo local no levanta cabeza pese a que la semana pasada se habían habilitado ROEs para la exportación. Por el contrario, retrocedió entre 13 y 15 u$s/tn. El Gobierno estima que habrá más trigo y que el saldo exportable alcanzará los u$s 1500 millones. El gobierno nacional oficializó su primera proyección para la cosecha de trigo de la nueva campaña, que está en proceso de siembra, y calculó la producción en 12 MMT, lo que representa una suba del 30% respecto al resultado del año pasado. Esta estimacion está en línea con otras estimaciones privadas, como la de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que prevé una cosecha de 11,5 MMT. El dato oficial indica que podrían ingresar divisas por exportaciones del cereal por unos u$s 1.500 millones, aunque el número final depende de cuánto permita exportar el Gobierno.
Por Lic Natalia Colombo, Analista de Mercados BLD
Fuente: Centro de Gestion Agropecuaria