Allí, las abundantes precipitaciones del último ciclo agrícola demoran la finalización de la cosecha pero son auspiciosas para las próximas siembras. La novedad son los materiales de ciclo corto con mayor potencial de rinde que permiten sacarle más jugo a las ventanas de siembra.
En el NEA la campaña agrícola 2014/15 viene a paso lento. Los factores en juego son varios, pero el climático está jugando un rol preponderante. Así se percibió entre los productores y técnicos que asistieron a la jornada técnica organizada por Nidera Semillas en el norte de Santa Fe, convocados junto a la Cooperativa Unión Agrícola de Avellaneda y Agronegocios Rubén Del Fabro. Este encuentro es el primero de una serie de otras reuniones técnicas que la empresa estará llevando a cabo el 31 de julio en Pehuajó, provincia de Buenos Aires, luego en Río Cuarto, Córdoba, y Rosario, Santa Fe.
La abundancia de lluvias durante el último ciclo derivó en un marcado retraso de la cosecha, que en el caso de la soja está terminando ahora -un mes después de lo habitual- mientras que el grueso del maíz todavía no se empezó a recolectar. Esto genera demoras en la toma de decisiones sobre las futuras siembras, ya que se espera que recién cundo cuenten con los resultados finales de la cosecha los productores comenzarán a tomar posición respecto de la próxima campaña.
Pero si bien la situación hídrica viene generando esas demoras, también ha permitido la obtención de muy buenos rendimientos en los diferentes cultivos y augura un buen arranque de la cosecha 2014/15. Al respecto, Guillermo Forlín –gerente zonal de Nidera- explicó que “venimos con los perfiles muy recargados y eso derivó en un incremento importante de la superficie destinada a trigo, que en general presenta un muy buen desarrollo, a la vez que también es positivo para las próximas siembras de girasol y de maíz temprano”.
Aunque las condiciones son propicias para la siembra de girasol, se espera que el crecimiento del área triguera le reste algo de superficie a la oleaginosa, tanto por ocupación de lotes como porque los ingresos del cereal permitirán cumplir con uno de los objetivos que tiene el girasol en esa región, que es proporcionar algo de liquidez sobre fin de año.
Con respecto al maíz, en los últimos años la tendencia fue un marcado crecimiento de las siembras tardías. Sin embargo, Guillermo Alonso –gerente del Servicio Técnico de Nidera- considera que “con los buenos niveles de humedad que muestran los suelos se espera que para la próxima campaña haya una recuperación del área con maíz temprano y también, desde lo productivo, son buenas las perspectivas para las siembras tempranas de girasol”.
“En esta región –agregó Alonso-, los lotes que salen de girasol pasan a un cultivo de tercera, que puede ser maíz, sorgo o soja, que se siembra entre mediados y fines de enero. Por lo tanto, estamos presentes con híbridos de girasol que permiten desocupar el lote 15 a 20 días antes que los ciclos largos que son muy usados en la región y esto es clave para las siembras de tercera. Además, nuestros girasoles tienen la tecnología Clearfield que nos permite contrarrestar a las malezas duras, ofreciendo un aumento de la productividad del cultivo pero también una desocupación más limpia del lote. Otra ventaja de los girasoles de Nidera es que tienen capítulos decumbentes que se esconden dentro del canopeo protegiéndose del ataque de aves”.
Entre los híbridos de girasol presentados en la jornada, Sergio Osuna –del servicio técnico de Nidera- destacó al Paraíso 1100 CL Plus. “Es un cultivar muy adaptado para el NEA, con un ciclo intermedio corto que si se siembra en las fechas óptimas, de fines de julio o primera quincena de agosto. Permite una desocupación temprana del lote y se adapta bien a las situaciones en las que las siembras se retrasan a fines de agosto o septiembre”. Además, mencionó las características de los cultivares de girasol Paraíso 303, Paraíso 1000 CL PLUS y Aromo 105 CL, todos con muy buenos potenciales de rendimiento en esa región y con muy altos tenores de materia grasa.
En maíz, Osuna presentó a los asistentes 3 versiones nuevas de híbridos templados, que son los que en las últimas campañas vienen ganando terreno frente a los tropicales. Los tres cultivares tienen incluida la tecnología Clearfield. Uno de ellos es el AX 852 HCL MG que tiene un ciclo un poco más corto que los híbridos templados que se vienen usando en la región y por lo tanto encuadra bien en las siembras de mediados de enero posteriores al girasol. Otro es el AX 887 HCL MG con un ciclo un poco más largo que el anterior y por lo tanto muy recomendado para lotes que vienen con un barbecho largo y siembras del 20 de diciembre al 5 de enero. El tercer híbrido de maíz que se presentó fue el AX 7822 HCL MG, con un ciclo similar al AX 852 y que se destaca por su caña y su sanidad, con muy buena tolerancia al ataque de tizón, una enfermedad que en esa zona castiga mucho en marzo a los híbridos templados.
La soja también estuvo presente en la jornada, tanto con nuevos materiales de cultivares RR1 como con las variedades de Súper Soja BT que han ofrecido muy buena respuesta frente a los ataques de los principales lepidópteros de esa región. En RR1 presentaron dos variedades de ciclos intermedios, la NS 5258 del grupo 5 corto y la NS 6483 del grupo 6 intermedio. En tanto que de Súper Sojas BT estuvieron 3 cultivares que van del grupo 5 medio hasta el 6 medio: NS 5419 IPRO, NS 6419 IPRO y NS 6909 IPRO
Alonso estimó que “en esta región posiblemente habrá un mayor crecimiento de los cultivares de soja de ciclos más cortos en las siembras de este año, ya que se presentan condiciones muy favorables que propician altos potenciales de rendimiento, por lo que creemos que los grupos 5 corto y 5 medio sumarán más hectáreas que en otros años”.