Por centésima vigésima octava vez, el campo llega a la ciudad con su tradicional muestra de La Rural, en Palermo, que comenzó el jueves. Y, como es habitual, la maquinaria agrícola es uno de los platos fuertes de la muestra, ya que las empresas aprovechan para mostrar sus innovaciones.

Todos los referentes de las compañías, entrevistados por Clarín Rural, coinciden en que están enfocados más que nunca en brindar soluciones tecnológicas concretas a los principales desafíos que debe afrontar hoy el productor. Entre los factores que entran en consideración está la permanente aspiración de producir más kilos de grano o de forraje por hectárea, pero aplicando más eficientemente los insumos; los problemas como las malezas resistentes, que requieren cada vez más información técnica para armar una estrategia productiva; y el traslado de actividades a nuevas zonas, por ejemplo.

Por el lado de la marca alemana Claas, y teniendo en cuenta la necesidad de mayor capacidad de trabajo para trillar cultivos más rendidores, están presentando, como una de sus novedades, una cosechadora arrocera, la Tucano 460 R, que brinda una mayor eficiencia de cosecha para este cereal. Justamente, se trata de una cualidad clave, ya que la cosecha de arroz presenta muchas particularidades con respecto a la de otros cultivos. Según Reynaldo Postacchini, vicepresidente de Claas en Argentina, la mayor eficiencia de esta máquina se apoya en el mayor caudal de entrega de grano que hace el acelerador de la máquina que está previo al cilindro/cóncavo. Además, la mejor calidad de tratamiento que hace del grano el sistema axial de la trilladora evita el daño.

Este fierro cuenta con todas las herramientas tecnológicas (mapeo de rendimientos, medidor de humedad y sistema de telemetría, entre otros) que hacen al nuevo paradigma de producción.

Otra de las innovaciones de la compañía alemana que se muestra en Palermo apunta al productor de forraje: la enfardadora prismática Quadrant 3200, que logra más de cien fardos por hora, de máxima calidad y compactación. Su característica destacada es el sistema de alimentación PFS (Power Feeding System), que garantiza un flujo mejorado, homogéneo y una capacidad de absorción mucho mayor por parte del acarreador.

Otra de las grandes marcas internacionales que es parte de la feria porteña es John Deere. En este caso, también se inclinan por el desarrollo de herramientas para un productor cada vez más de punta y avanzado.

Con su línea “Green System”, la compañía norteamericana sostiene que sigue desarrollando soluciones para un agricultor que toma toda la información técnica que le proveen sus ambientes para planificar estratégicamente cada campaña.

“Los nuevos productos Green System llegan para ofrecer nuevas soluciones integrales a nuestros clientes”, comentó el gerente de ventas de la compañía en Argentina, Fernán Zampiero.

En esa paleta hay tres modelos de tolvas autodescargables (de 20.000, 25.000 o 30.000 litros), la pulverizadora montada de 600 litros y la pulverizadora de arrastre de 2.600 litros, además de la extractora de granos para bolsas de 9 y 10 pies y la nueva embolsadora de granos.

La compañía del ciervo muestra también tres nuevos tractores de más potencia de trabajo y de producción nacional: los 5065E, 5075E y 5725, fabricados en la planta de Granadero Baigorria, pegadito a Rosario.

Está claro que uno de los temas que más preocupan actualmente al productor es el de las malezas de difícil control. En este contexto, la calidad de las aplicaciones de agroquímicos gana mucha relevancia. Por eso, el grupo Pla, de Las Rosas, Santa Fe, relanza en Palermo la MAP 3500, una pulverizadora de transmisión automática y alas de carbono.

Además, presenta en Palermo el fertilizador autopropulsado MAF 6000, con sistema de fertilización y siembra neumática. La siembra neumática de fertilizante es una característica distintiva respecto de la competencia, destaca Josefina Oldani, responsable de desarrollo de producto de la firma.

La técnica explica, además, que están poniendo mucho foco en el tema de malezas resistentes. “Estamos desarrollando en fábrica, junto con las empresas DyE y Geosistemas, mecanismos para pulverizadoras que hagan lecturas automáticas y apliquen el químico justo en el momento de detectar las malezas en el rastrojo”, detalla Oldani.

Otro de los sistemas relacionados, que también está en desarrollo -añade la técnica- es el de inyección directa del producto en la línea. “En este caso, la aplicación, que ahora depende de la lectura que hace el ojo del operador mientras aplica, se haría por inyección completa en cobertura total cuando se observa un manchón de malezas en el campo”, explica la especialista.

Volviendo a los tractores, otra de las marcas referentes en el segmento en el campo argentino es New Holland. La compañía tiene en Palermo un ejemplar de la línea TDF, especialmente diseñado para tareas en cultivos de frutas. Es el TD 75F.

Dentro del segmento de los forrajes conservados y para aquellos productores ganaderos que también son muy buenos produciendo alimento, la compañía muestra la enfardadora gigante BB 1270. Este equipo se destaca por su alta productividad y facilidad de mantenimiento, destacaron los técnicos de la firma del Grupo CNH.

Por su parte, la cordobesa Mainero, de Bell Ville, se muestra en la exposición palermitana con dos productos “fuertes”, dice Marcos Formica, responsable de asistencia técnica y posventa de la firma.

Uno es la rotoenfardadora 5886, que se lanza en la muestra y se comenzará a vender a partir de octubre de este año, y que llega en reemplazo de la 5885. El otro es el relanzamiento del cabezal maicero MDD-100.

Formica comenta que ambos productos están en sintonía con el lema de la empresa respecto a los nuevos productos, que es “versatilidad de trabajo y simpleza para manejarlos”, sin descuidar la mayor eficiencia que siempre tienen que llevar incorporada.

La nueva roto -explica Formica- incorpora un alimentador rotativo, nuevo atador de red y un expulsador de rampa, todas innovaciones que pretenden aumentar la capacidad de trabajo del equipo.

Por su parte, el cabezal maicero que presenta la compañía tiene como gran ventaja la capacidad de trabajar en múltiples distanciamientos entre líneas o direcciones de avance, sin necesidad de ajustes, modificaciones o adaptaciones, manteniendo acotadas las pérdidas de recolección y sin resignar productividad.

Esta herramienta -precisó Formica- ganó el premio norteamericano AE50 que es otorgado por la Sociedad Americana de Ingeniería Agrícola y Biológica a las mejores 50 innovaciones del mundo en sistemas agrícolas, alimentarios y biológicos.

El técnico resume que la firma está buscando diferenciarse con desarrollos que tiendan a la versatilidad y facilidad de manejo, ya que “en los últimos años, las máquinas se hicieron mucho más sofisticadas, generando en no pocas oportunidades una tarea más compleja para el agricultor”.

Por su parte, la cordobesa Akron llegó a Palermo con toda su línea de tolvas autodescargables, de hasta 28 toneladas de capacidad de carga y de muy buena eficiencia de trabajo para acelerar las labores agrícolas en los momentos picos de cosecha. Ya que también piensa en la siembra, en Palermo está la línea de acoplados para asistir a sembradoras y fertilizadoras.

Además, por el lado de los fierros ganaderos, los de Akron llevaron la línea de mixers verticales con renovadas características, a partir de la incorporación de un “rotor cónico”, que debido a las características de diseño, requiere de una menor potencia de trabajo entregada por el tractor.

Aunque el mercado interno no está pasando por su mejor momento, dato con el que coincide Esteban Martínez, responsable de comercio interno de Martínez & Staneck, de Tandil, la marca llevó a la muestra cinco máquinas, entre las que se encuentran el trozador de rollos que se coloca encima del mixer horizontal, una embutidora de seis pies y otra de nueve pies “energía cero” que se carga por gravedad.

En definitiva, al recorrer el salón de los fierros agrícolas queda demostrado que siguen estando a la altura de lo que se viene en materia de desafíos productivos, a pesar de que la coyuntura del negocio agrícola, en cuanto a rentabilidad, no constituya el mejor de los escenarios. Pero, seguramente, las cosas van a cambiar.

Una demanda que viene complicada

El año viene complicado para el sector fierrero. Tres testimonios resumen el pulso que ven desde algunas empresas, según recogió Clarín Rural en Palermo.

“Es cierto que bajó la actividad, pero el mercado se está moviendo. Nosotros tenemos vendida la producción de los próximos dos meses”, dice Josefina Oldani, responsable de desarrollo de producto de Pla.

Marcos Formica, responsable de asistencia técnica y posventa de Mainero, reconoce la coyuntura “complicada” y dice que afecta tanto a máquinas para agricultura como ganaderas.

Para Esteban Martínez, de Martínez & Staneck, “la demanda interna por ahora está detenida y el comercio exterior se sostiene, porque venimos achicando los costos para mantenernos competitivos en dólares”.