El comité de crisis hídrica –conformado por representantes del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Social, INTA, Senasa, Cruz Roja, Bomberos y asociaciones civiles locales junto al Municipio bonaerense de San Pedro– realizó un plan de contingencia que releva las necesidades y prioridades de los pequeños productores ante la crecida del río Paraná.
En este contexto, Carlos Casamiquela –ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación– visitó San Pedro y se interiorizó sobre el Plan de contingencia quien destacó la articulación ante la problemática y el censo, lo que permite conocer el estado de situación y prever la evacuación. Y se puso a disposición “para ofrecer colaboración y responder a todas las necesidades de los productores para evitar, o reducir al máximo, las pérdidas”.
Por su parte, Daniel Somma –director del Centro Regional Buenos Aires Norte del INTA y coordinador de la emergencia hídrica– explicó que “la superficie de pastoreo anegada en las islas aumentó” y agregó que “los grandes productores ya comenzaron a evacuar, mientras que los pequeños esperan hasta último momento para evitar el costo y complicación que implica el traslado, albergue, alimentación y posterior restitución de los animales”.
En este sentido, recomendó a los pequeños productores “estar atentos a posibles lluvias en la cuenca alta o sudestadas, evaluar el movimiento del agua y el área de pastoreo que tienen disponibles sus animales y, en el caso de estar en riesgo, tomar contacto con el municipio para solicitar la asistencia en materia de evacuación y mantenimiento del ganado”.
Y agregó: “La onda de crecida que viene bajando por el Paraná podría derivar en anegamientos en zona de islas de las ciudades bonaerenses de San Nicolás, Ramallo, San Pedro y Baradero, con la consecuente reducción de las zonas de pastoreo de animales”.
Para ello, se realiza un seguimiento de las alturas en la Cuenca Alta y Media a partir de datos del Instituto Nacional del Agua (INA) y del Centro de Investigaciones Meteorológicas (CIM) de la Universidad del Litoral.
En este contexto, el organismo –junto a la subsecretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y la dirección de Emergencia del Ministerio de Seguridad– relevó las necesidades de asistencia de los pequeños productores a fin de colaborar en materia de transporte y alojamiento de los animales.
De acuerdo con el informe, hay 209 pequeños productores en las islas de las ciudades de San Pedro, Baradero y Ramallo, las cuales cuentan con un total de 4.655 bovinos, 592 ovinos, 440 ovinos, 1.460 aves y 253 equinos, además de varias colmenas. De estas familias, el 90% tiene un lugar donde alojarse en el continente.
La crecida podría derivar en anegamientos en zona de islas en San Nicolás, Ramallo, San Pedro y Baradero.
Aguas abajo
De acuerdo con un informe del Instituto de Clima y Agua del INTA Castelar, las alturas hidrométricas en el puerto de Rosario –Santa Fe– alcanzan los 4 metros y estaría en el nivel de “evacuación para el sector ganadero”. Asimismo, indica que, según el pronóstico, continuaría en ascenso hasta mediados de julio con un pico de crecida de 4,65 metros para el viernes 11 de ese mes, por lo que se recomienda a los productores el retiro de los animales de la zona de islas del Delta, no así de la población.
En cuanto al puerto de Corrientes, se observó que el 18 de junio hubo un pico de crecida de 7,16 metros y luego comenzó a descender. Esta onda de crecida se trasladaría aguas abajo, paulatinamente, hasta alcanzar sus máximos en los próximos días, de acuerdo a lo publicado por el INA.
Por su parte, el puerto de Iguazú marcó un pico de crecida el 10 de junio con 38,60 metros. Si bien hasta la fecha los niveles de agua continúan en descenso, de acuerdo a las lluvias pronosticadas por el Servicio Meteorológico Nacional para los próximos días, podría haber un nuevo ascenso.