El mercado doméstico de granos, inactivo desde el miércoles, asimiló ayer en forma parcial las fuertes bajas registradas por la soja y por el maíz en la Bolsa de Chicago durante las ruedas del jueves y del viernes de la semana pasada. Este retroceso hizo que prácticamente no se concretaran operaciones en el recinto de la Bolsa de Comercio de Rosario, dado que los vendedores optaron por esperar un repunte de las cotizaciones para desprenderse de la mercadería.
Por tonelada de soja con entrega inmediata, las fábricas ofrecieron 2410 pesos para las terminales de General Lagos, Timbúes, San Martín, Arroyo Seco y para Ricardone, $ 50 menos que el miércoles pasado. Para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea, los exportadores propusieron 2430 y 2370 pesos por tonelada, 50 y 40 pesos por debajo de los valores vigentes en la rueda anterior.
El impacto bajista también se reflejó en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), donde las posiciones mayo y julio de la soja cerraron con ajustes de 308 y de 313,30 dólares por tonelada, con quitas de 4 y de 7,90 dólares.
Ayer, las pizarras de Chicago mostraron altibajos para los precios de la soja. Los contratos mayo y julio perdieron 3,31 y 2,75 dólares, y terminaron la jornada con ajustes de 540,87 y de 537,66 dólares por tonelada, en tanto que la posición noviembre, que marca el inicio del ciclo comercial 2014/2015, subió US$ 1,84 y cerró con un valor de 451,03 dólares.
Los persistentes rumores sobre soja brasileña en tránsito hacia puertos estadounidenses volvieron a presionar el nivel de las posiciones de corto plazo y alentaron nuevas ventas por parte de los fondos de inversión especuladores, que lentamente comienzan a poner su atención (y sus dólares) sobre los contratos de la próxima cosecha, que evidencian un atraso relativo de poco menos de 90 dólares respecto del nivel de precios actual. Esta brecha configura una interesante opción de negocios -también un riesgo- para estos grandes jugadores, sobre todo si el clima demora la siembra o si perjudica el futuro desarrollo de los cultivos estadounidenses.
En tal sentido, tras el cierre de las operaciones, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) relevó ayer la siembra estadounidense de soja 2014/2015 sobre el 5% del área prevista, por encima del 3% de la semana anterior y del 2% del año pasado para la misma fecha, pero por debajo del 11% promedio de las últimas cuatro campañas. El dato oficial fue inferior a la previsión de los operadores, que calculaban un progreso de entre el 7 y el 10%. Esta noticia podría alentar hoy otra suba para las posiciones de la nueva cosecha.
En retroceso
Los exportadores ofrecieron ayer $ 1380 por tonelada de maíz con entrega hasta pasado mañana sobre San Martín, $ 20 menos que el miércoles. En cuanto a las operaciones con descargas más diferidas, en Bahía Blanca la demanda mantuvo su propuesta de US$ 175 por maíz para el bimestre mayo/junio. El cereal para junio y julio sobre San Martín se cotizó a 165 y a 160 dólares, con bajas de 3 dólares.
En su reporte diario sobre la actividad de los consumos, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) sólo relevó ofertas para la planta de Baradero: $ 1400 por maíz seco y con entrega hasta el 17 del actual, y US$ 163 por cereal seco y descarga en junio.
Las posiciones julio y septiembre del maíz en el Matba perdieron ayer un dólar y terminaron la rueda con ajustes de 164,50 y de 165,50 dólares.
En la Bolsa de Chicago, luego de tres ruedas negativas consecutivas, los contratos mayo y julio del maíz subieron US$ 3,64 y 3,35, en tanto que sus ajustes resultaron de 198,12 y de 199,99 dólares por tonelada. La certeza de que el avance de la siembra durante el fin de semana no fue todo lo auspicioso que se preveía fue la responsable de las subas.
Según el informe del USDA, la siembra de maíz estadounidense progresó sobre el 29% del área prevista, por encima del 19% de la semana pasada y del 11% vigente a igual momento de 2013, pero por debajo del 42% promedio de los últimos cuatro ciclos. El mercado esperaba un avance de entre el 35 y el 38%, razón por la cual las cotizaciones del cereal podrían mantenerse firmes en la rueda de hoy.
Alzas ajenas
Pese al contexto global alcista, el mercado de trigo disponible argentino registró ayer otra jornada sin variantes, dado que los pocos compradores interesados en concretar operaciones volvieron a ofrecer US$ 240 por tonelada para Bahía Blanca. Con compras totales de la exportación al 23 de abril por 2,03 millones de toneladas y con un cupo exportable sostenido por el Ministerio de Agricultura de la Nación en 1,5 millones, no se prevén cambios en el actual clima de calma que domina la escena local.
En el Matba, las posiciones julio y enero del trigo subieron US$ 2,20 y 1, en tanto que sus ajustes fueron de 256,20 y de 202,50 dólares.
En la Bolsa de Kansas, la posición mayo del trigo subió ayer US$ 2,57 y quedó con un valor de US$ 308,19, el nivel más alto desde diciembre de 2012. El mal estado de los trigos de invierno en EE.UU. (como se amplía por separado) y el persistente conflicto bélico entre Ucrania y Rusia -grandes exportadores-, son los principales factores alcistas para el cereal.
No mejora la condición del trigo en EE.UU.
Luego del cierre de los mercados, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés) difundió ayer su informe semanal sobre el estado de los cultivos estadounidenses. En él, el organismo redujo un 2% el estado bueno/excelente de las variedades de trigo de invierno, una condición que ahora sólo comprende al 31% de las plantas. El dato oficial sorprendió a los operadores, que esperaban una mejora del 1 por ciento.
El impacto alcista de la situación actual se refleja con particular fuerza en la Bolsa de Kansas, ubicada en un estado clave para la producción estadounidense del cereal. Ayer, el USDA indicó que sólo el 17% de cultivos de Kansas está en estado bueno/excelente. Además, el viernes pasado, tras recorrer la región, un tour de técnicos estimó en 7,1 millones de toneladas la cosecha de trigos de invierno de Kansas, la más baja de los últimos 13 años.
En cuanto al trigo de primavera, el USDA relevó ayer la siembra sobre el 26% del área prevista, lejos del 41% promedio de los últimos cuatro ciclos.