Las dos son mayonesas. Una está está en los precios “cuidados” por el Gobierno y los súper, es de una etiqueta poco conocida (Ri -K) y viene en sachet: vale $ 7,30 en su presentación de 485 gramos. La otra es de la marca más conocida de la categoría (Hellmann’s). También viene en sachet (de 475 gramos) y se despacha a $ 10,49.

La diferencia de precios es del 42%.

El caso refleja lo que pasa con casi medio centenar de los productos “cuidados”: al lado de los mismos puede estar uno casi igual –misma categoría, presentación – pero que es entre 20% y 100% más caro.

Así lo constató Clarín en varios súper en productos de almacén, cosmética y tocador, bebidas, lácteos y panes. Los fideos secos tallarín pastas Canale que están “acordados” a $ 6,50 están en las góndolas al lado de los Luchetti, que cuestan un 46% más, a $ 9,49. Luchetti viene haciendo un trabajo de construcción de marca por el cual cree que la gente pagará un adicional por su producto. En el medio, están los tallarines de Terrabusi a $ 8,09.

Las yerbas son otra muestra de esta situación. El kilo de “Amanda” (“acordado”) se despacha a $ 27, pero la misma presentación de Nobleza Gaucha y Cruz de Malta se encuentran a $ 36,99, un 37% más cara que lo acordado.

Otro envasado con contrastes es el cacao en polvo. El “acordado” es el Toddy, a $ 7,70, pero mucha gente recurre al Nesquik –lo que se conoce como una marca genérica, ya que el grueso del público identifica el producto directamente con esa etiqueta– a $ 10,63. La diferencia es del 38%. En las góndolas, uno está al lado del otro.

Cuando este diario anticipó la lista de los productos que iban a formar parte del acuerdo, uno de los interrogantes que planteó fue sobre las mermeladas. En el acuerdo, había una sola variedad (ciruela) y faltaban sabores. El viernes de la semana pasada, durante la presentación del acuerdo, el secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, se refirió puntualmente a este caso. “No es objetivo de la política de precios poner las 25/50 variedades de mermelada que hay en el mercado. Si está la mermelada de frutilla o la de ciruela, no hace falta que esté la de frambuesa, porque un consumidor sabe cuando está la mermelada de ciruela y en función de su capacidad de pago y su preferencia, si quiere pagar un 10%-20% más por la frambuesa está en todo su derecho a hacerlo, pero sabiendo cuando sale la mermelada de ciruela, va a poder realizar es decisión informada. Distinto es cuando entra a un supermercado y la mermelada de ciruela sale una cosa, después en otro sale distinto”, dijo el viernes. Ayer, la mermelada de ciruela estaba a $ 14,55, el precio “cuidado”. Pero la de frutilla se ubicaba a $ 19,05, un 30% más cara. Y la de damasco estaba a $ 20,19, un 38% por encima.

La mayoría de los productos de los “precios acordados” entre el Gobierno y los súper se conseguía ayer en las cadenas. Pero hay distorsiones como la de la mayonesa, en productos como pañales, galletitas, puré de tomate, arvejas, soda, jabón en polvo y pasta dental.