El mercado de maíz está aprendiendo a convivir con una cosecha inédita en los Estados Unidos, que superó los 355 millones de toneladas. Y en ese diario ejercicio, que recientemente llevó los precios hasta el nivel más bajo de los últimos dos años, ayer se registró un repunte parcial en la Bolsa de Chicago, producto de compras hechas por los fondos de inversión, que podrían haber iniciado un retorno a la plaza cerealera.
Al cierre de los negocios, las pizarras mostraron subas de US$ 2,36 y de 3,05 sobre los contratos diciembre y marzo del maíz, cuyos ajustes resultaron de 166,33 y de 170,17 dólares por tonelada. Durante la rueda, los fondos adquirieron unos 9000 contratos, equivalentes a poco más de 1,14 millones de toneladas. Compras de ocasión de los operadores comerciales influyeron también en la suba de las cotizaciones.
Uno de lo fundamentos que podría empujar a los especuladores a tomar una mayor participación en el mercado de maíz -y posiblemente a recortarla en la plaza sojera- es la buena evolución de las exportaciones estadounidenses, que ya están próximas al 70% del volumen estimado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés) para todo el ciclo comercial 2013/2014.
No obstante, los analistas advierten que el diferendo con China, que rechazó dos cargamentos de maíz estadounidense por contener variedades transgénicas no autorizadas por las autoridades sanitarias de ese país, es un signo de interrogante que debería ser despejado para que no afecte la confiabilidad de las exportaciones.
En el mercado local volvió a reflejarse un escaso interés de los exportadores por el maíz argentino. La única oferta abierta fue de US$ 150 por tonelada de cereal con entrega en marzo sobre San Martín, sin cambios.
La falta de un efectivo interés de la demanda queda en evidencia con el siguiente dato: hasta el 20 de noviembre el Ministerio de Agricultura de la Nación relevó compras del sector exportador por 1.397.600 toneladas de maíz 2013/2014, un 86,22% por debajo de los 9.777.600 toneladas de igual momento de 2012.
Ayer, la consultora estadounidense Informa Economics estimó la cosecha argentina de maíz en 25 millones de toneladas, por debajo de los 26 millones previstos por el USDA.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los consumos pagaron entre 970 y 1200 pesos por tonelada de maíz, según calidad, procedencia y forma de pago. En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones diciembre y abril subieron US$ 2,80 y 1, en tanto que sus ajustes fueron de US$ 175,20 y de 163.
Acerca de la soja, en la Bolsa de Chicago los contratos enero y marzo perdieron US$ 0,55 y terminaron la jornada con valor de US$ 484,93 y de 479,33. La favorable evolución de la campaña en los países productores de América del Sur y la sobreexposición de los fondos especuladores fueron los factores bajistas de la rueda.
Informa Economics elevó ayer de 86,7 a 88 mill./t su previsión para la cosecha de soja de Brasil y mantuvo en elevados 59,5 millones su cálculo para la producción argentina.
En el mercado local, las fábricas no hicieron ofertas abiertas por soja disponible, aunque se habrían concretado contados negocios entre $ 2070 y 2100. La soja nueva, con entrega en abril sobre San Martín, se cotizó a US$ 295, con una baja de US$ 2. Un comprador propuso US$ 300 por mercadería con descarga en marzo.
Por trigo, la exportación pagó $ 1450 (US$ 236) en Bahía Blanca; US$ 220 en la zona de Rosario, y US$ 210 en Necochea. El valor propuesto por los molinos rondó los 1500 pesos.