Con el aumento de los combustibles, que alcanzó al campo en un insumo clave como el gasoil, los productores ahora deberán sacar de sus bolsillos unos $ 2335 millones adicionales para cubrir la campaña de granos gruesos, que incluye los cultivos de soja, maíz y girasol, y que representan el 80% de la producción.

El dato se desprende de un análisis del productor Néstor Roulet, que considera los litros de gasoil que se consumen en cada cultivo por hectárea, según las actividades de siembra, pulverización, fertilización, cosecha, acondicionamiento y transporte, y el gasto que esto representa también por hectárea. Además, la evaluación pondera cómo fue evolucionando el precio del gasoil. En rigor, a modo de ejemplo, el combustible fue subiendo de los 6,39 pesos el litro que costaba cuando el año pasado se estaba sembrando la soja, al promedio de 7,99 pesos [incluido el último aumento promedio, de algo menos del 6,5%] para esta campaña.

A los productores, realizar todas las tareas para la soja, el maíz y el girasol les demandó 11.288 millones de pesos en la campaña pasada. Ahora tendrán que invertir $ 13.623 millones. Son $ 2335 millones más o un 21% de incremento. Vale recordar que esto abarca exclusivamente a esos tres cultivos de verano. Y por supuesto no toma la variación del precio que pueda producirse en los próximos meses. Para tener en cuenta, del gasto extra de $ 2335 millones que deberán afrontar los productores, la soja se llevará $ 1662,8 millones; el maíz, $ 534,5 millones, y el girasol, $ 137,7 millones.

Contratistas preocupados

En el sector ya acusaron recibo del mayor gasto. Y en la Federación Argentina de Contratistas de Máquinas Agrícolas (Facma), que agrupa a quienes prestan el servicio de siembra y cosecha, advierten que sus socios se encuentran "complicados" porque la suba del gasoil se suma a los costos en general de la actividad. "El gasoil es uno de los rubros que más impacta en nuestros costos. Hoy el combustible representa el 25% del costo; viene aumentando desde cuando hace diez años estaba en el 10 o 12%", señaló a LA NACION Jorge Scoppa, presidente de Facma.

Scoppa describió la situación de estos actores que, además de sembrar y cosechar para los productores, realizan siembras bajo la figura que se conoce como "productor contratista".

"Yendo bien, apenas te salvás. Estamos mal porque también hay alquileres altos y tenemos que mantener los equipos [por la maquinaria agrícola]", explicó el presidente de Facma.