El año pasado se publicó en estas páginas la historia de una vaca super fértil que en un campo de la localidad de Algarrobo, al sur de la provincia de Buenos Aires, había parido trillizos por segunda vez en menos de un año. Ahora una noticia similar llega desde la localidad bonaerense de Maipú, donde hace pocas semanas una vaca Aberdeen Angus de la estancia “La Pangaresa” tuvo trillizos por segundo año consecutivo.

El mundo científico veterinario está asombrado por estos casos que, según afirman, se dan una vez cada 100.000 partos. “Lo habitual es que las vacas tengan un ternero. La posibilidad de mellizos aumenta bajo tratamientos reproductivos, pero no es significativa a lo largo de los años. Y de trillizos, con manejo y servicio natural y en años consecutivos, es mucho más extraño”, señaló Jorge Cereceda, médico veterinario y subsecretario de Producción del municipio de Maipú.

Según indicó, varios factores influyen en la frecuencia de los partos múltiples, como la edad de la vaca o la época del año en la que tiene lugar la concepción. “La frecuencia de partos múltiples en las vacas de menos de tres años de edad es muy baja, pero aumenta hasta los seis a diez años de edad”, dijo Cereceda.

En los dos recientes casos, los servicios fueron naturales, las vacas estaban alimentadas a campo en esquemas típicos de las zonas de cría y los partos tuvieron lugar en el medio del lote. La vaca de Algarrobo logró mantener con vida a cinco de los seis terneros, mientras que la de Maipú, a la que sus cuidadores llaman “Cristina”, había perdido a dos de sus crías de la primera tanda. Como es de suponer, el estado corporal de la vaca no era el ideal al momento del segundo servicio, pero aun así quedó preñada nuevamente de trillizos. Son tres machos que por razones lógicas no tuvieron el mismo peso al nacer que un ternero que se cría sólo con su madre.

“Los terneros nacidos en partos dobles suelen tener al nacer un peso 20-30 % más bajo que en el caso de nacimientos de un solo ternero, siendo la duración de la gestación menor que en partos simples”, explica Cereceda. “La mortalidad perinatal (es decir, el indicador de los riesgos de muerte ligados al momento del parto) es 3 a 4 veces más alta que en partos únicos. Además, generalmente uno de los terneros es más débil, y frecuentemente es abandonado por la vaca que amamanta sólo al más fuerte. Pero el problema más grave radica en que el intervalo entre partos es más largo después de un parto múltiple, ya que es más difícil lograr la concepción siguiente debido a un aumento de retenciones placentarias y al agotamiento de las reservas de la vaca por la doble gestación y el doble amamantamiento”, dice el especialista.

Por lo tanto, en nuestras condiciones de cría, el ternero de más ganado un año, se pierde al siguiente. Esto podría solucionarse con un buen tratamiento veterinario por las retenciones placentarias y haciendo destete precoz en las vacas que parieron mellizos. “Por otra parte, aproximadamente el 90% de las terneras nacidas gemelas con machos son estériles debido al defectuoso desarrollo de los órganos genitales provocado por el intercambio hormonal en la gestación” añade el veterinario.

Hoy, Cristina goza de buena salud y amamanta y atiende normalmente a sus tres recientes crías. A los terneros se les está dando un manejo especial, apoyando la alimentación con el alimento para destete precoz Ruter. Al cierre de esta edición, toda la familia se preparaba para ir a la exposición Rural de Maipú, que comenzó ayer y finaliza mañana, donde los niños podrán ponerles nombre a los terneros.