Gran parte de las regiones agrícolas continúan secas tras varias semanas con escasez de lluvias, lo que podría llevar a los productores a sembrar el cereal en forma tardía o directamente a implantar soja en su lugar, según informó el Ministerio de Agricultura.
Si bien se registraron lluvias la semana pasada, estuvieron por debajo de lo previsto. Sólo permitirán comenzar a sembrar en algunas zonas, pero los suelos de muchos campos aún están demasiado secos para enterrar los granos y la situación genera preocupación en el sector.
La escasez de lluvias también afecta al trigo, que comenzó la etapa de encañazón con récords de temperaturas máximas y sin agua. El desarrollo vegetativo ha sido pobre en general. Salvo en la porción oriental bonaerense, ya hay pérdidas de potencial de rinde y de prolongarse la falta de agua se profundizarán los efectos, ya que empieza la etapa de alto consumo de agua del cultivo, destacó la Bolsa de Comercio de Rosario.
La Argentina es el tercer exportador mundial de maíz. Sin lluvias, el potencial de siembra de este cereal tambalea y puede quedar por debajo de las 900.000 hectáreas en la región núcleo, agregó la Bolsa de Rosario.
El Ministerio de Agricultura advirtió que, en Río Cuarto (Córdoba), la siembra de maíz temprano ya está afectada, y se debe tener en cuenta que sólo quedan 10 días para tener buenas lluvias para poder sembrar temprano; de lo contrario, algunas de estas hectáreas se sembrarán recién en diciembre y otras pasarían a soja.
Córdoba es la segunda mayor provincia maicera de la Argentina, después de Buenos Aires, y la más perjudicada por la escasez de agua. Los bajos precios del cereal y los altos costos de su producción, por la inflación, también desalientan a los agricultores. Por eso la soja es una opción atractiva, ya que es más barata y resistente que el maíz, y su exportación no está limitada por el Gobierno. La siembra de la oleaginosa también empieza este mes, con la llegada de la primavera.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima que en la temporada productores destinarían 3,56 millones de hectáreas al maíz.
Sobre el trigo, el Ministerio de Agricultura dijo que las lluvias de la última semana ayudaron en algunas zonas al sediento cereal 2013/14, que recién está emergiendo de la tierra, aunque todavía se necesita más agua para su adecuado desarrollo y evitar pérdidas de rendimiento.
La provincia de Buenos Aires fue la más favorecida por las lluvias recientes, mientras que el cereal de Córdoba y Entre Ríos (segunda y tercera provincias trigueras) sigue en condiciones críticas. Según el Ministerio, los productores destinaron 3,9 millones de hectáreas al trigo del ciclo 2013/14, desde los 3,16 millones de la campaña previa.