Las últimas lluvias del mes de junio que se dieron en el sur de Brasil afectaron a la provincia de Misiones, lo que provocaría la crecida más importante de los ríos Paraná e Iguazú en 15 años, al tiempo que este fenómeno trajo complicaciones a Corrientes, Entre Ríos, Chaco y Santa Fe.
En efecto, cerraron algunos sectores turísticos en Cataratas, las cuales, en las últimas horas de la tarde del miércoles 26/6 alcanzaron un caudal de 14.300 metros cúbicos por segundo, un volumen once veces superior al que se registra usualmente en el río Iguazú. Es por eso que levantaron la pasarela para recorrer la Garganta del Diablo.
La empresa Iguazú Argentina, concesionaria del Área Cataratas del Parque Nacional Iguazú, informó que, pese a que hay circuitos que están cerrados, desde otros se puede ver a las Cataratas "en su máximo esplendor".
Asimismo, no se puede pasar hacia el norte de Misiones por la ruta nacional 12, según informó Vialidad Nacional. Estas intensas lluvias en la región de la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina, ya causaron inundaciones que dejaron cientos de evacuados en localidades paraguayas.
Y se espera un mayor volumen de agua en Corrientes, con un caudal de 39.000 metros cúbicos por segundo para esta última semana de junio. En esa provincia, la crecida del Paraná ya afectó a casi 30 familias que debieron abandonar sus hogares y buscar refugio en una zona más elevada, mientras que en Chaco prevén crecidas de hasta 7 metros e inundaciones en rutas.
En Santa Fe, declararon el estado de emergencia, ya que, se espera que la crecida del Paraná tenga impacto durante las próximas semanas y que lleve a que el curso de agua supere la marca de evacuación establecida en 5,70 metros.