El Gobierno logró una desaceleración de la inflación , pero no un congelamiento integral de los precios de la canasta básica. De acuerdo con las cuestionadas estadísticas del Indec , la inflación de febrero se ubicó en 0,5%, lo que implica el menor índice en casi cuatro años, aunque el rubro de alimentos y bebidas aumentó 0,4 por ciento impulsado por las subas en el azúcar, la carne, los panificados, los lácteos y las gaseosas.
El menor ritmo inflacionario ya había sido descontado por la mayoría de las mediciones privadas, que igualmente dan cuenta de una suba del costo de vida real en febrero cercana al 1 por ciento.
Según el Indec, en el caso de los alimentos la mayor suba se registró en el precio del azúcar, que avanzó 1,5%, seguido por las carnes (0,9%), los panificados (0,7%), aceites (0,6%), bebidas sin alcohol (0,6%) y los lácteos y las bebidas alcohólicas (0,4 por ciento).
En cambio, el congelamiento parece estar funcionando a la perfección para las frutas y verduras, que registraron bajas de 1 y 2,6%, respectivamente.
En este caso, el dato más llamativo es que para el Indec los alimentos en febrero -es decir, el primer mes del congelamiento de precios- habrían tenido un aumento superior al registrado en enero, que había sido de 0,3 por ciento.
Por fuera de los alimentos, el Indec también dio cuenta de incrementos importantes en los útiles escolares (1,6%), esparcimiento (1,3%) y alquiler de vivienda (0,9 por ciento). Sin embargo, para el organismo controlado por Guillermo Moreno los grandes culpables de la inflación de febrero parecen haber sido los medios de comunicación, ya que el mayor aumento del mes correspondió al rubro diarios y revistas, que tuvo un incremento del 4,1 por ciento.
Con el incremento de febrero, para el Indec la inflación acumulada en los
primeros dos meses de 2013 alcanzó a 1,6 por ciento, mientras que en los últimos
doce meses la suba asciende al 10,8 por ciento.
Por su parte, los precios mayoristas subieron 1 por ciento, acumulando en el
primer bimestre un alza de 2,1%, mientras que los materiales aumentaron un 0,8
por ciento y en el año tuvieron un incremento de 1,2 por ciento.
EN LÍNEA
Al menos por este mes, el Indec parece estar en línea con los sondeos privados que también dieron cuenta de una marcada desaceleración de los precios.
"La inflación tuvo un freno importante gracias al congelamiento de los precios en los supermercados, pero el problema es que difícilmente se pueda sostener en el largo plazo", advirtió Fausto Spotorno, economista jefe del estudio de Orlando J. Ferreres.
En voz baja, en una consultora admiten que la inflación se ubicó en uno de los niveles más bajos de los últimos tres años. "Se frenaron las subas de los alimentos, lo que sumado a otros factores estacionales nos está dando que la inflación de febrero se ubicó en torno de 0,5 por ciento", precisaron en una consultora que prefiere no dar a conocer sus mediciones por temor a sufrir nuevas represalias oficiales.
Por su parte, en otra consultora dan cuenta de una suba un poco superior a la del Indec, aunque igualmente inferior al promedio de los últimos meses, en los que se ubicó en torno de 2 por ciento.
"Nuestra medición nos dio un incremento del 0,8 por ciento en febrero, aunque está claro que este congelamiento de precios difícilmente sea sostenible en el tiempo", explicaron.
PIDEN EXTENDER LA BAJA DE LAS COMISIONES
La Cámara Argentina de Comercio (CAC) pidió ayer que el proyecto de bajar las comisiones que cobran los bancos a las grandes cadenas de supermercados y electrodomésticos por las operaciones con tarjetas de crédito se extienda a los pequeños y medianos comercios. "La posible instalación en el mercado de un nuevo instrumento de compra respaldado por una entidad bancaria oficial con una presunta alícuota mínima para ser aplicada a supermercados, hipermercados y a otros grandes rubros motivó la posibilidad de que los demás agentes privados emisores de tarjetas ofrezcan bajar el porcentaje", expresó la CAC en un comunicado.La Cámara pidió que "en este proceso que puede permitir reducir costos y aumentar el consumo no se discrimine dejando de lado al pequeño y mediano comercio minorista". La entidad resaltó también "la posibilidad de una disminución en los costos que enfrentan los consumidores y una mejora en el alcance y plazos de las ventas sin interés".