Los futuros de la soja en Chicago explotaron ayer: tuvieron su mayor alza diaria en más de seis meses, con un avance de 3,2% o u$s 17 por tonelada. Así la posición marzo, la más activa en la principal plaza comercial de commodities agropecuarios, terminó en u$s 540 la tonelada.
El principal impulso para el comportamiento alcista fue el clima en la Argentina: no hubo lluvias suficientes durante el fin de semana sobre la zona sojera local como para revertir los daños que la falta de agua y el calor extremo hicieron en el último mes y medio.
En ese contexto, la publicación especializada Oil World bajó a 50 millones de toneladas su estimación de producción final sojera en la Argentina por el mal clima, desde las 52 millones de toneladas que esperaba el mes pasado. Ésta es la tercera vez en lo que va de la campaña que la publicación con sede en Hamburgo que recorta su previsión sobre la cosecha local.
El clima ha estado críticamente seco en las últimas cuatro a seis semanas en al menos el 40% a 50% del área de producción de soja de Argentina, agotando la humedad de los suelos y creando tensión en las cosechas, dijo Oil World. Y alertó que existe el riesgo de revisiones adicionales a la baja a menos que caiga el volumen requerido de lluvias en las próximas una a tres semanas.
Muchos analistas locales, incluso, comenzaron a hablar de un techo productivo de no más de 50 millones de toneladas y algunos hasta se arriesgan a considerar más factible que la campaña termine estando más cerca de 48 millones de toneladas. Pese a esa caída, la cosecha sigue estando entre 20% y 25% por encima del ciclo previo, que recolectó 40 millones de toneladas.
Condiciones
Aunque sostienen que por las condiciones de siembra diferentes fechas y resiembras en mismos lotes ante los distintos problemas climáticos, resulta muy difícil realizar estimaciones, consideran que la falta de lluvias en los primeros 15 días de febrero, sumadas a las altas temperaturas de casi todo el mes y la posterior baja abrupta de la temperatura puede dañar aún más los rindes.
Esas consideraciones impulsan los precios. El valor de cierre de ayer en Chicago no se registraba desde hace diez días cuando el Departamento de Agricultura estadounidense (Usda) reveló existencias de soja norteamericana por encima de lo estimado.
Desde ese momento, cuando la soja había arañado los u$s 550 la tonelada, los futuros tuvieron un raid bajista que tocó un piso por debajo de u$s 520 la tonelada. Ahí comenzó a tallar el factor clima en América del Sur, en especial en la Argentina.
Ayer, junto con la suba en Chicago, la soja en la Argentina se movió hacia arriba: 2,7% de alza para la posición mayo en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), que cerró a 341,5 por tonelada.
No obstante esa oferta, casi no se registraron operaciones. Los productores siguen alejados de un mercado ávido de cerrar negocios, comentan los analistas. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señalo que el mercado se mostró algo más animado que las ruedas anteriores ante la incesante búsqueda de las fábricas por hacerse de soja, que llegaron a ofrecer $ 1.750 la tonelada con descarga inmediata.