La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció ayer que su gobierno planea eliminar todos los impuestos federales sobre los alimentos básicos, ampliando una serie de exenciones tributarias que apuntan a contener la inflación, que según las previsiones alcanzará este año un 5%.
Rousseff dijo en un programa radial que los impuestos federales ya habían sido eliminados para el arroz y los frijoles la comida básica de los trabajadores del país pero que otros alimentos también serán liberados, especialmente los de la canasta básica, dijo Rousseff en una estación de radio en el estado de Paraná.
Las rebajas y exenciones de impuestos han sido una herramienta primordial del equipo económico de Rousseff para avivar el estancado crecimiento económico y para controlar la inflación.
Los economistas dicen que la inflación se está acelerando, luego de cerrar 2012 en un 5,8%.
La presidente brasileña informó que el Gobierno actualizará una lista de 13 alimentos en la canasta de productos considerados esenciales para que una familia brasileña viva un mes, que no ha sido modificada por años.
Además del arroz y los frijoles, la canasta incluye pan, manteca, carne, leche, café, azúcar, aceite, papas, tomates, plátano y harina de mandioca.
Rousseff añadió que el gobierno federal no había podido convencer a los gobiernos estatales de unirse a la medida y de abandonar sus propios impuestos locales adicionales sobre los alimentos básicos.
A continuación, la presidenta afirmó que la política de desgravación por sectores que su gobierno lleva adelante desde hace dos años, junto con la tendencia a la baja de las tasas de interés, garantizará el crecimiento de la economía nacional, que será más lento debido a que el mercado internacional aún no se recupera de la crisis global, según señaló.
El gobierno estima que la economía, que cerró 2012 con una expansión menor al 1%, crecerá este año en torno al 4%.
Sobre la política de desgravación que se aplica ya a diversos sectores, como los automóviles y la línea blanca, el ministro de Hacienda, Guido Mantega, dijo en un foro empresarial celebrado en San Pablo que la intención del gobierno es mantenerla e incluso profundizarla.
Mantega hizo un repaso de diversas medidas adoptadas para reducir los costes financieros y de energía, y aseguró que el Ejecutivo se propone para este año una mayor reducción de costos tributarios.
Según el ministro, Brasil está en una cruzada para reducir los costos de producción, a fin de abaratar la vida de sus ciudadanos y dotar a las exportaciones de una mayor competitividad.
Sector servicios
Respecto del crecimiento de la economía, un sondeo privado reveló que la actividad en el sector de servicios de Brasil se expandió en enero a su mayor ritmo en casi un año.
El índice de Gerentes de Compras (PMI) de HSBC para el sector de servicios de Brasil subió a 54,5 en enero desde 53,5 de diciembre, según bases ajustadas estacionalmente . Fue la mayor lectura para el indicador desde febrero y el quinto mes consecutivo en que el índice se mantuvo sobre la marca 50, que separa una expansión de una contracción.