Un importante sistema frontal frío provocó precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas de moderada a fuerte intensidad sobre toda la zona central del país. En la región núcleo se recibieron tormentas de muy alta intensidad.


Mapas de precipitación acumulada en las últimas 24 horas al 20/12/2012

Las zonas más afectadas en las últimas 24 horas son los departamentos de Rosario, San Lorenzo, este de Caseros, Iriondo, Belgrano, San Martin y San Jerónimo donde las precipitaciones han superado los 100 mm. También el oeste entrerriano resultó sumamente afectado.

El epicentro de las mayores descargas estuvo sobre el centro de Rosario donde en las últimas 24 horas acumuló 176 mm, que se suman a los 138 mm de los tres días anteriores. De esta manera Rosario ha recibido en estos cuatro días 314 mm y en lo que va del año el acumulado es de 1930 mm.

También se destacan los registros de la localidad de Montes de Oca, donde en las últimas 24 horas recibió 117 mm que se agregan a los 145,2 acumulados en los días previos.

Las lluvias semanales fueron generalizadas sobre la región núcleo y hay mucha incertidumbre sobre el impacto que tendrán en el estado de los cultivos de las zonas más afectadas. Hay mucha preocupación en el sudeste santafesino por la evolución de los cuadros implantados. En la región núcleo desde hace dos semanas no se puede avanzar con las siembras pendientes. De esta manera siguen en espera los lotes de la última tanda de soja de primera y las siembras de segunda de los cultivos de soja y maíz.

En el siguiente gráfico se observa el volumen y el alcance regional de las lluvias en los últimos 7 días en la región núcleo.

De acuerdo con los especialistas en meteorología de CCA (Centro de Climatología Aplicada) y Jolap, la tormenta está exhibiendo un lento desplazamiento hacia el nordeste, alcanzando las zonas litoraleñas. Se espera que en el resto de las jornada sólo haya chaparrones débiles, y a partir del lunes 24 se prevé el avance de una nueva perturbación de niveles medios que puede llegar a provocar nuevas precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas aisladas de corta duración.