"Estamos teniendo una primavera muy llovedora y no se ve un cambio en el corto plazo. La semana que viene y la próxima vamos a seguir teniendo lluvias", dijo la especialista Stella Carballo, del Instituto de Clima y Agua del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Advirtió Carballo que las ventanas entre lluvia y lluvia son muy pequeñas "con lo cual no da tiempo a la absorción, evaporación y a recuperación del piso".
En tanto, para el climatólogo de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, Eduardo Sierra, si bien el fenómeno El Niño es el disparador, "hay que tener en cuenta que el cambio climático global imprime una fuerte oscilación que hace que se pase de un extremo seco, como fue la campaña 2011/2012 a un extremo húmedo, como es la presente, sin solución de continuidad".
Según Sierra, "las zonas bajas de la cuenca del Salado pueden quedar inundadas por largo tiempo, pero son esencialmente ganaderas, y no gravitan significativamente en los totales productivos de granos, pero malezas, enfermedades y plagas se están dando el gran banquete y van a incidir en los costos. La calidad del producido se va a resentir".
Entiende el especialista que seguirán las fuertes tormentas posiblemente hasta enero, "y sólo en febrero empezaría a tranquilizarse el clima". Y esto obligará a cambios en las estrategias de los productores.
Acerca de la afectación en el desarrollo de los cultivos, Sierra sostuvo que la soja tendrá buenos rindes en Buenos Aires , aunque con cierta disminución de calidad. "Habrá que tener cuidado con la mancha ojo de rana y las enfermedades de fin de ciclo (EFC)", agregó.
En maíz se pueden esperarse muy buenos rindes. En trigo y girasol los rendimientos no serán del todo buenos por efecto de enfermedades, baja calidad y posible pérdida de lotes por anegamiento.
Mucho más de lo normal
En el área de influencia de la Guía Estratégica para el Agro (GEA), de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que abarca básicamente el sur de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos y norte de Buenos Aires las lluvias excedieron los valores normales para octubre.
En los primeros 22 días del mes se han superado los 300 milímetros como en el caso de Bell Ville y Labordeboy, con 300,4 y 315 milímetros respectivamente. El registro más bajo fue el de Idiazábal, con 130 milímetros.
Las marcas típicas promedio para octubre en la zona oscilan entre los 90 y 100 milímetros,por lo que en este mes en particular y en tan sólo 22 días se ha registrado entre el doble y el triple de la precipitación histórica mensual.
A todo esto, Carballo ratificó que está lloviendo más de lo normal. "En Concordia, por ejemplo estamos acercándonos a los 500 milímetros en octubre, cosa que es una barbaridad. En un mes llovíó la mitad de lo que es la media del año."
También señaló que hubo en el último mes un acumulado de 300 milímetros en el sur de Córdoba y sur de Santa Fe. "Por ejemplo está muy afectada la localidad de Roldán", señaló.
"Resumiendo o sumando todas las lluvias, tenemos sur de Códoba, norte de La Pampa, sur de Santa Fe y Entre Ríos como los lugares más afectados. También el norte de Buenos Aires ha recibido lluvias muy fuertes", señaló Carballo.