La Argentina va ganando mayor protagonismo en el mundo como productor de biodiesel, ya que la elaboración de este combustible creció a pasos agigantados en los últimos años. En 2010, aumentó un 51%, al sumar cerca de 1,9 millón de toneladas frente al 1,25 millón de 2009, cuando ya había crecido un 31%, según datos de la Cámara Argentina de Energías Renovables (Cader) que agrupa a las empresas de un sector que ya mueve u$s 1.900 millones.
Así, el país pasó del 7º puesto mundial en 2007 al 5º en 2009. Y el año pasado subió otro escalón, al quedar en el 4º lugar, sólo detrás de Alemania, Francia y Brasil, y desplazó a Estados Unidos al 5º puesto. �La producción de Estados Unidos cayó porque le quitaron el subsidio de u$s 300 por tonelada, cuando el precio internacional ronda los u$s 1.000�, explicó Carlos St. James, presidente de Cader. Para 2011, se prevén al menos 2,2 millones de toneladas de producción local.
La industria trabaja a poco más del 85% de la capacidad instalada. Este año, se van agregar dos plantas más en Santa Fe. Una de Cargill, de 240.000 toneladas de capacidad, y otra de Unitec Bio (Corporación América, de Eduardo Eurnekián), que duplicará su capacidad, con 220.000 toneladas más, precisó St. James. Así, la Argentina ampliará un 24% su capacidad, a 3,08 millones de toneladas a fines de este año.
El 99% del biodiesel se elabora a partir del aceite de soja. Por ello, el 80% de la capacidad instalada está en la provincia de Santa Fe, ya que son las grandes aceiteras con nueve plantas en total las que aportan el 56% del total. Otro 24% corresponde a empresas independientes, que deben comprar la materia prima a las aceiteras, y un 20% a pequeños productores. El resto de la capacidad se localiza en las provincias de Buenos Aires (8%) y Santiago del Estero (7%), entre otras
Tenemos grandes ventajas competitivas para producir biodiesel; contamos con un promedio de 108.130 toneladas de capacidad por planta, el mayor a nivel mundial. Las grandes aceiteras no sólo tienen disponibilidad de materia prima, sino también un puerto junto a la planta, con lo cual tienen mucha eficiencia, explicó.
La Argentina exporta el 68% de la producción, siendo Europa el principal destino, en tanto que un 32% va al mercado local, en virtud de que las petroleras deben cortar el diesel con un 7% de biodiesel nacional. Este año, el corte fijado para diesel podría aumentar de 7% a 10%. Y se creó un nuevo mercado por una medida del Gobierno para generar energía a partir de fuentes renovables, en lugar del gasoil o gas natural. Por eso, la demanda podría crecer a 3,2 millones de toneladas, destacó St. James. El único temor es que la UE, el principal comprador, cierre el ingreso al biodiesel local para proteger su industria.