El titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, reclamó hoy al Gobierno que disponga controles en la comercialización del trigo para evitar que sea dominada por "unos pocos grupos multinacionales" que, según denunció, ganaron "2.500 millones de pesos en la cosecha presente".
"Hay un precio internacional que podría permitir, aun considerando las retenciones, que el productor reciba 85, 88 centavos por kilo de trigo. Hace tres o cuatro años que estábamos por debajo de los 50 centavos, en este último año 60 centavos. Las diferencias se las quedan las empresas que comercializan o los grandes molinos harineros", aseguró.
Según Buzzi, las limitaciones a la exportación de este cereal dispuesta por el Gobierno obliga al productor a malvender su cosecha a molinos y exportadores, que pagan el grano por debajo del valor del FAS Teórico (conformado por el precio internacional menos las retenciones y los aranceles aduaneros).
En declaraciones a radio Continental, el dirigente agrario sostuvo que "hay una transferencia de los productores hacia cuatro o cinco grandes grupos, multinacionales casi todos, de 2.500 millones de pesos, mientras el consumidor ve que el pan se le fue de dos pesos a los ocho o diez pesos".
Esta problemática será analizada este mediodía por la Mesa de Enlace Agropecuaria que, además de la FAA, integran las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Coninagro y la Sociedad Rural.
"Del esfuerzo que hace el productor -dijo Buzzi- terminan generándole un pingüe negocio a Cargill, a Dreyfus, a Bunge. Si no fuera tan irritante y llamativo, uno podría sospechar que esto es un mecanismo corrupto".
El dirigente le reclamó al Gobierno que la producción de trigo "no sea un coto de caza para cuatro o cinco empresas que compran barato con exportaciones cerradas, después se las abren arbitrariamente en algún punto del año y venden a valores internacionales fenomenales, que después triangulan con paraísos fiscales".
"Lo que estamos reclamando es un sistema de comercialización, que se defienda el precio de los productores y los intereses nacionales. Han favorecido en trigo y maíz a grandes corporaciones internacionales. El libre comercio no es tan libre comercio porque hay monopolios y posiciones dominantes", se quejó.