
Eslovaquia enfrenta un nuevo brote de fiebre aftosa
Recientemente, Eslovaquia ha reportado tres focos de fiebre aftosa confirmados en la región de Trnava, específicamente cerca de la frontera con Hungría. Estas infecciones fueron confirmadas el 21 de marzo de 2025. Ante estos acontecimientos, se ha implementado una zona restringida que incluye áreas de protección y vigilancia, donde se están aplicando rigurosas medidas de control de enfermedades tal como estipula el Reglamento Delegado (UE) 2020/687.
La fiebre aftosa es una enfermedad vírica que ataca a los mamíferos artiodáctilos, y puede tener consecuencias devastadoras tanto para la salud animal como para la viabilidad económica del sector ganadero. Para mitigar estos efectos, la UE ha establecido estas medidas con el objetivo de evitar trastornos en el comercio dentro de su territorio y prevenir que terceros países introduzcan restricciones injustificadas.
El estado de precaución en España
Frente a esta situación, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España ha hecho un llamado a toda la comunidad ganadera a mantener la "máxima prudencia y precaución". La evolución del virus en otros países comunitarios requiere que no se baje la guardia y se maximicen los esfuerzos en medidas de bioseguridad en cada explotación. En sus declaraciones, también se discutió el balance del Plan Estratégico Nacional de la Política Agraria Común (PAC), haciendo hincapié en la importancia de proteger el sector ganadero.
Se registra un sexto foco de infección en Eslovaquia
La situación ha empeorado con la identificación de un sexto foco de fiebre aftosa en Plavecký Štvrtok, ubicado a tan solo 50 kilómetros de la frontera con República Checa. Esta granja, que alberga casi 3.500 cabezas de ganado, será despojada de su ganado antes de que acabe la semana, de acuerdo con información difundida por la cadena Ta3. En un esfuerzo por contener el brote, el ministro de Agricultura de Eslovaquia, Richard Takac, ha señalado que se llevarán a cabo test regulares en toda la provincia de Malacky.
Sin embargo, la gravedad de la situación ha llevado al Gobierno eslovaco a declarar estado de emergencia sanitaria nacional. Hasta ahora, los cinco focos anteriores se habían registrado al sur de la región de Trnava, en áreas colindantes con Hungría, que también ha visto la aparición de dos focos de fiebre aftosa en el norte del país.
Medidas de control en la frontera
La expansión del virus ha llevado a las autoridades checas a intensificar las medidas de seguridad en su frontera con Eslovaquia. Con el objetivo de proteger su sector ganadero, el ministro checo de Agricultura, Marek Vyborny, ha anunciado un endurecimiento de las medidas en el paso fronterizo Breclav-Brodské en la autopista D2. Estas acciones son cruciales para prevenir la propagación del virus en una región tan interconectada.
En una medida adicional, Austria, que no ha reportado brotes desde 1981, ha proliferado una vigilancia intensa en su franja este. Desde la semana pasada, se han realizado cerca de mil test aleatorios, todos con resultado negativo. Además, las autoridades austríacas han restringido la importación de animales vivos de especies susceptibles, así como otros productos provenientes de Eslovaquia y Hungría, en un esfuerzo por mantener la bioseguridad.
¿Estamos realmente preparados para enfrentar la amenaza de la fiebre aftosa? La situación continúa evolucionando, y es fundamental que tanto países como productores se mantengan alertas y comprometidos con las medidas de prevención establecidas. Estar bien informados y adaptarse a las circunstancias puede marcar la diferencia en la salud del ganado y, por ende, en la rentabilidad del sector ganadero.
Fuente: Agriculteca