
La campaña de trigo 2024/25 marcó un hito en el sector agropecuario argentino. Con una producción nacional de 18,6 millones de toneladas (MTn), un 23,2 % más que la campaña anterior, el grano dorado protagoniza un repunte histórico. Este incremento se traduce en un impacto económico directo: exportaciones que generarán ingresos por USD 2.910 millones y una recaudación fiscal de USD 926 millones, un 20 % más respecto al año anterior.
Dinámica de siembra y producción
En la campaña 2024/25 se sembraron 6,3 millones de hectáreas (MHa), un crecimiento del 6,8 % respecto al ciclo anterior y del 6,6 % frente al promedio de los últimos 10 años. Las lluvias otoñales crearon condiciones óptimas para la siembra, mientras que la mejora en los precios del cereal y los insumos incentivó una expansión de 100.000 hectáreas en las zonas productivas clave del centro y sur del país.
El rinde promedio nacional alcanzó los 30,4 quintales por hectárea (qq/Ha), un 7 % más que en la campaña 2023/24 y un 6 % superior al promedio de los últimos cinco ciclos. Destacan los rendimientos en los núcleos productivos del centro y sudoeste de Buenos Aires, que compensaron la caída en el sudeste, donde las altas temperaturas impactaron negativamente.
Impacto económico y exportaciones
El crecimiento en la producción de trigo se traduce en un aporte significativo a la economía nacional. Se espera que el complejo triguero en 2025 aporte USD 2.890 millones, un incremento del 26 % respecto al año anterior. Las exportaciones de trigo también repuntarán, alcanzando un crecimiento del 49 % con ingresos estimados en USD 2.910 millones. Este impulso también se refleja en la recaudación fiscal, con un aporte de USD 926 millones.
Desempeño regional
Las variaciones regionales en la superficie sembrada y los rendimientos ilustran la diversidad del panorama productivo:
- En el NOA y el NEA, la superficie sembrada se mantuvo estable o creció mínimamente (+0 % y +9,1 %, respectivamente).
- En el Centro-Norte de Córdoba y el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, el aumento fue significativo, con incrementos del 30,1 % y el 33,1 %.
- En contraste, el Sudeste de Buenos Aires registró una disminución del 8 % en la superficie sembrada debido a factores climáticos adversos.
Avances tecnológicos y sostenibilidad
El uso de tecnologías modernas, como semillas de alto rendimiento y sistemas de monitoreo avanzado, contribuyó a maximizar la eficiencia. A pesar de los desafíos climáticos, la capacidad de adaptación del sector permitió sostener la competitividad y mejorar los resultados.
La campaña de trigo 2024/25 no solo representa un logro productivo sino también una oportunidad para consolidar a la Argentina como un actor clave en el mercado mundial de cereales. Con exportaciones al alza y un impacto económico tangible, el trigo reafirma su lugar como pilar de la economía nacional. Los desafíos futuros implicarán mantener este ritmo de crecimiento mientras se enfrentan los retos del cambio climático y la sustentabilidad.
Información: Informe Cierre de Campaña – Bolsa de Cereales