FIN DE SEMANA DE INVIERNO

Durante el mes de mayo las lluvias han mostrado un significativo desplazamiento hacia el centro norte de la Mesopotamia, con eventos muy poco significativos dentro de las principales zonas agrícolas de la región pampeana y también del NEA y NOA. Dentro de este contexto, la circulación del sector sur se ha mostrado con mayor frecuencia y en general ha predominado sobre la circulación de aire tropical. Esto se ha reflejado en el comportamiento de las temperaturas, con promedios que en las tres primeras semanas del mes resultaron normales o inferiores a las normales. Los suelos húmedos atenuaron o evitaron la concreción de las primeras heladas sobre todo en el sur la zona núcleo, pero si se presentaron en la provincia de BA y LP. Claramente vemos una transición hacia el trimestre de invierno bajo un escenario más frío que el del año pasado y este patrón tiene su incidencia sobre la oferta de agua. De hecho, durante el último fin de semana se concretó la primera irrupción de aire con fuente en latitudes cercanas a los polos y un despliegue de heladas que alcanzo las zonas mediterráneas del norte del país.

La recirculación de aire húmedo desde los trópicos hacia la región pampeana está teniendo el último reposicionamiento intenso del otoño durante esta semana. Como vimos, en términos pluviales esto ha afectado fundamentalmente al litoral y a la Mesopotamia, ya sin lograr un influencia positiva sobre otras zonas del país. Sin embargo, esto genera un fuerte efecto moderador en las temperaturas y además deja un vasto despliegue de nubes bajas y fenómenos de condensación, nieblas y neblinas. Esto último es algo típico de estas fechas, que la transición otoño invierno suele presentar. Para el fin de semana, un nuevo frente frío repondrá las bajas temperaturas. Las mismas avanzaran sobre la franja central recién durante la jornada del domingo, pero para entonces ya volverá a helar en el sur de la región pampeana.

Respecto de las lluvias del trimestre frío, debemos tener en cuenta que ingresamos en la época en que normalmente la dinámica de escala regional es la que tiene mayor protagonismo en la circulación. Lo que queremos decir, es que es un trimestre que se vuelve bastante independiente de lo que suceda con el ENSO en cualquiera de sus signos.

Si se valida el predominio de circulaciones intensas del sector sur, seguramente tendremos un invierno más seco, pero esto no tendrá que ver con la potencial llegada de La Niña para la primavera. En términos de cambio climático, los registros de los últimos veinte años, van mostrando una tendencia hacia inviernos más secos en áreas del litoral, pero este es un dato estadístico que se debe valorar en cada campaña de acuerdo a las condiciones iniciales, o sea a las reservas que va dejando el trimestre de otoño.

En cuanto a reservas, las condiciones de partida son buenas, normales o por encima de los valores normales en gran parte de las zonas que van a la fina. No hay limitantes o mejor dicho hay margen para el laboreo de las siembras. Esto no quita que haya que hacer trabajos de conservación del agua acopiada. Sin ir más lejos, la última irrupción de aire frío y las que vienen posiblemente devendrán en más de quince días sin precipitaciones de importancia. Esto se verá durante el invierno, principalmente junio y julio: periodos extendidos libres de precipitación y alguna ocasional recarga de aire tropical que permita generar algún evento pluvial más destacado. En el medio circulación del sur y del este, con eventuales días grises con lluvias débiles. Lo que está bastante claro es que salimos de la sobreabundancia pluvial con el evento de la semana pasada en el centro norte de la Mesopotamia. Actualmente el sudeste bonaerense está más seco que lo habitual, pero es una zona con potencial para lograr recargas en el mes de junio y además cuenta con una ventana de siembra bastante más extendida que otras áreas trigueras.

De validarse un primer bimestre frio del invierno, se podría establecer una herramienta muy apreciada para minimizar el despliegue de la plaga que afectó al maíz. Entendemos que este escenario es inicialmente factible. Veremos cuáles son las respuestas de la circulación de escala regional e iremos monitoreando en los próximos informes el comportamiento de las temperaturas.