La situación en Brasil es muy triste.
Para el Estado de Rio Grande do Sul, se pronostican nuevas precipitaciones.
Se estima que, por lo menos, los próximos cinco días serán de lluvias lo que agravará el cuadro caótico de este Estado.
No solo se trata de los cultivos. También, se trata de la red caminera y ferrocarrilera y, en general, de la infraestructura.
Los problemas para acceder a los puertos por parte de los tenedores de granos se agravan día a día.
Los costos de flete se han incrementado a raíz de los cortes en las rutas, lo que obliga a los trasportistas a tomar caminos alternativos de mayores distancias.
En cuanto al mercado del día miércoles, hubo fuertes bajas, por toma de ganancias, luego de las recientes recuperaciones de precios.