Este finde semana, la Sociedad Rural de General Guido emitió un comunicado “sobre la creación de nuevas tasas”. La misma se titula “Seguimos pagando la fiesta” y rechaza la creación de una nueva tasa de emisión de guías de traslados, actualización y creaciones de estas.

“Nuestro sector productivo, el único en el distrito porque no existe otro tipo de iniciativa que no esté ligada al agro, viene de sufrir tres años de una sequía enorme, donde el Municipio y el Estado provincial estuvieron ausentes para mitigar los efectos. Pero sí siguen presentes para recaudar.”, aseguran en la nota.

Comunicado completo:

                                                  Seguimos pagando la fiesta

Un nuevo tiempo, con primeros choques: recién la semana pasada y sin abrir instancia de diálogo con los productores o nuestra entidad como representante, fue presentado el proyecto de ordenanza con el Presupuesto Municipal 2024, para General Guido, donde nos "desayunamos" con actualizaciones de tasas por encima de la inflación y, peor, la creación de nuevas.

Rechazamos la creación de una nueva tasa en la emisión de guías de traslado, que ahora se indica, será para mantenimiento de espacios públicos: que no nos corresponde sólo a los productores ganaderos solventar "servicio", como tampoco el denominado "Fondo Cultural". El municipio pretende ajustar en los privados, su ineficiencia.

¿Por qué el sector agropecuario tiene que pagar las fiestas del municipio y los arreglos de los espacios públicos, cuando resulta que no nos arreglan los caminos a productores, vecinos y transportistas del área rural? Hace cuatro años, los caminos que comunican a pueblos y parajes para los que nos cobran tasas y guías, sólo empeoran: faltan alteos y alcantarillas; hay pantanos en las lomas; no se ha invirtido en maquinarias, y más problemas. Es por ahí que se mueve la producción, los habitantes del área rural, la policía, ambulancias y los chicos que van a la escuela.

Nunca se nos ha convocado a analizar o acordar las tarifas o tasas municipales que nos afectan de manera directa. Hemos puesto nuestra institución al servicio del diálogo y colaboración, pero se nos ha ignorado permanentemente.

Nuestro sector productivo, el único en el distrito porque no existe otro tipo de iniciativa que no esté ligada al agro, viene de sufrir tres años de una sequía enorme, donde el Municipio y el Estado provincial estuvieron ausentes para mitigar los efectos. Pero sí siguen presentes para recaudar. Quédense tranquilos: cumpliremos con nuestras obligaciones impuestas -porque hay pocas alternativas legales para negarse- pero, aún pesimistas en el pedido, ojalá el Municipio cumpla con sus deberes.