La ganadería de cría en el norte del país es, en general, compleja. Es que, en estos sistemas productivos extensivos la oferta forrajera disponible, en su mayoría, es pastizal que no logra cubrir los requerimientos de las categorías en crecimiento durante ciertas épocas del año. De allí, la necesidad de suplementar para poder alcanzar los objetivos planteados en sistemas más eficientes.
“La técnica de suplementación tiene numerosas ventajas”, reconoció José Rosello –especialista en producción animal subtropical del INTA Colonia Benítez–. De acuerdo con el investigador, “con esta tecnología se logran objetivos tales como el primer servicio de la vaquilla de reposición a los dos años y, así, cumplir una recría adecuada mejorando en hasta un 25 % la eficiencia de los sistemas en relación con variables como el porcentaje de preñez para los sistemas de edades de primer servicio más avanzadas”.
“Durante años, en el equipo de nutrición animal, se trabajó en caracterizar productos y subproductos de la industria con la intención de determinar sus virtudes y deficiencias para mejorar la eficacia de su uso en técnicas de suplementación. Uno de los puntos a considerar siempre fue la distribución, por ello disminuir la frecuencia de entrega del alimento además de la caracterización de este, ha sido un desafío, buscando el objetivo de facilitar la logística de distribución en sistemas extensivos y mejorar la práctica”, detalló Rosello.
El equipo de investigación avanzó en ensayos con reguladores químicos de consumo que permitan un nivel de consumo inferior al 0,7 % del peso vivo, no tan variable diariamente y sin afectar el consumo del pasto, con ganancias de peso de 400 gramos por animal por día, durante la época invernal.
“Luego de años de trabajo y fruto de la interacción pública-privada con la empresa Golden Brand S.A. obtuvimos un alimento con las características requeridas de autolimitación del consumo voluntario del balanceado, logrando suplementación inferior a 1 % y ganancias de peso adecuadas para categorías bovinas en recría”, celebró Rosello.
Mediante un convenio de transferencia de tecnología, la empresa Golden Brand S.A. fabricará y comercializará, en el mercado interno y de exportación, un suplemento regulador de consumo para la alimentación de bovinos desarrollado por el INTA.
Este logro compartido tiene numerosos beneficios, entre los que destaca la capacidad de disminuir los costos en estructura, optimizar el uso forrajero presente en el campo y reducir los costos en logística y producción.
Un logro, fruto de una extensa trayectoria
El equipo de investigación del INTA Colonia Benítez, Chaco, trabajó durante varios años en la caracterización de los alimentos de obtención local para comprender su funcionamiento en las diversas estrategias de alimentación, como la suplementación. Luego, se apuntó a lograr a lograr niveles que permitan obtener las ganancias adecuadas para las categorías en crecimiento y así poder bajar la edad de entore, objetivo fundamental en sistemas de cría.
Se evaluaron principalmente productos como la semilla de algodón y pellets proteicos con la intención de ver el efecto en el consumo del pasto y el nivel óptimo de uso para mejorar la performance animal. Luego, se avanzó sobre la logística de distribución para hacer más sencilla la técnica en sistemas de cría extensiva.
A partir de estos estudios, se pudo alcanzar la adopción extensiva de esta tecnología para, luego, avanzar sobre alimentos que permitan una mejor performance para el crecimiento y desarrollo animal, no solo en épocas de mala calidad de pasto sino también de baja producción.