La seca feroz que estamos atravesando va a dejar su huella en el Uruguay productivo. La gravedad de la misma, similar o hasta en algunos rubros superior a las de 1989 o 2018, va a generar pérdidas en la ganadería de carne, en la lechería y en la agricultura de secano. A la espera de una cuantificación responsable de esas cifras, hay algunas consideraciones que ya se pueden hacer.
Si bien en algunas partes del territorio cayeron algunas lluvias en momentos clave, que permitirán obtener una cosecha aceptable, con cobertura de los costos y en ocasiones incluso algunas ganancias al productor, se puede establecer en líneas generales que se espera una muy mala campaña de soja y maíz.
Hablar de rendimientos es difícil. Ha sido usual en los últimos años que las lluvias sean muy erráticas, siendo que algún productor tuvo la suerte y otro, situado a pocos kilómetros, vio con angustia pasar la tormenta por encima de sus cabezas. No estableceremos intentos de suponer promedios, pero indudablemente los mismos estarán por debajo de los de años anteriores, y siempre que hablamos de las chacras que se pudieron cosechar, teniendo en cuenta que en algunos casos ni siquiera eso tuvo sentido.
En la zona del litoral sur, departamentos de Colonia y San José, sumado a alguna parte del sur de Soriano, las aguas en general no llegaron a tiempo. En la zona centro, sobre todo en Flores o Florida hay chacras que se han enfardado y no van a llegar a cosecha, con promedios que se estiman debajo de la tonelada. En el litoral del país buena parte de la superficie fue a seguros de rendimiento, micropicado, silopack o incluso pastoreo del ganado. Las chacras de maíz que se salvaron son las de riego, e incluso en casos hubo problemas allí. Más al norte, el clima fue apenas más benevolente.
Se acerca un invierno complicado en reservas, pero el productor ya está desparramando sus cartas en busca de una pronta revancha en colza, trigo o cebada. “Fue un año perdido, pero hay que mirar siempre para adelante”, dijo un productor, retratando el ánimo general.