Súbitamente, el panorama global se ha complicado.
La amenaza de un gravísimo problema alimentario crece día a día.
La decisión del gobierno de Rusia de abandonar el acuerdo, que habilitaba las exportaciones agrícolas de Ucrania a través del Mar Negro -incluidas las de girasol y aceite de girasol- cayó como un rayo sobre el mundo.
Tras acusar a Ucrania de perpetrar un “ataque terrorista” con drones contra su flota en la bahía de Sebastopol, tomó esta drástica decisión este sábado.
“Considerando la acción terrorista del régimen de Kiev con la participación de expertos británicos contra la flota del mar Negro y contra buques civiles que brindan seguridad a los corredores de granos, Rusia suspende su participación en la aplicación del acuerdo sobre las exportaciones de productos agrícolas desde puertos ucranianos”, señaló sin mayores reparos el Ministerio ruso de Defensa.
El acuerdo, ya roto por Rusia, establece una coalición de personal turco, ucraniano y de la ONU, para supervisar la carga de granos en los puertos ucranianos de Odesa, Chernomosk y Pivdenyi, antes de navegar por el Mar Negro.
A partir del acuerdo, los buques graneleros y de transporte de fertilizantes podían cruzar el Mar Negro hacia el estrecho del Bósforo, en Turquía. Allí los esperaba un centro de coordinación conjunto en Estambul, que incluía representantes de la ONU, Ucrania, Rusia y Turquía. Se hacía ello, para asegurar que no transportaran armas o material de bélico.
Por otro lado, Ucrania ha dicho que Rusia creó una excusa para abandonar el acuerdo.
La situación escala en gravedad pues EE.UU. apoya esta posición. Por si ello no fuese suficiente, la UE acusó a Rusia de usar tanto el hambre como la comida “como armas” en la guerra.
“La Unión Europea –afirmó este organismo- condena la suspensión de Rusia de la Iniciativa de Granos del Mar Negro e insta a Rusia a revertir su decisión y reanudar de inmediato la implementación de la Iniciativa de Granos del Mar Negro de la ONU”.
Así las cosas, el precio del trigo comenzó a subir luego de bajas pronunciadas en las últimas semanas. El trigo culminó la jornada con subas de casi USD 20.-
Es bastante obvio que el conflicto seguirá. Y no sólo eso, también se acentuaría.
Por ello, el maíz también mejoró. Con el abandono de Rusia del acuerdo, las miles de toneladas de maíz ucraniano reservadas para su exportación hacia Europa, Asia y Medio Oriente entran en una fase de incertidumbre.
En tanto la soja mostró, este lunes, subas en la rueda de Chicago. El contagio con los precios de los cereales es evidente.
Así está el cuadro. Se destacan la suba del 6,39% (US$ 19,47) en la cotización del trigo, el alza del contrato de noviembre de la soja del 1,38%.