–LN: ¿Qué ventajas competitivas ofrece Paraguay en comparación a la Argentina en un contexto empresarial relacionado a los agronegocios?

–FS: Paraguay tiene mayores ventajas competitivas que la Argentina en agronegocios en lo referente al entorno normativo, fiscalidad y incentivos, flujo de capital y tipos de cambio, crecimiento económico y estabilidad, facilidad de adquisición de tierras, ente otros factores. Un desafío importante para la inversión en Argentina son las frecuentes variaciones en la política económica, que hacen que las condiciones de inversión sean bastante volátiles.

–LN: ¿Qué incentivos fiscales ofrece nuestro país en comparación a los de la Argentina?

–FS: Paraguay ofrece importantes ventajas fiscales en comparación con Argentina. En Paraguay, la tasa máxima del impuesto corporativo es del 10%, mientras que la tasa en Argentina es del 25%. El impuesto al valor agregado (IVA) en Paraguay es del 10%, pero hay un IVA reducido del 5% para alimentos básicos (arroz, fideos, aceites vegetales, té mate, leche, huevos, harina y sal), y para bienes agrícolas; verduras, frutas, animales vivos, carne y medicinas. En Argentina, el IVA común es del 27% (aplicado para servicios como comunicaciones y electricidad), pero la mayoría de los productos tienen un IVA del 21%.

Argentina aplica un IVA reducido de 10,5 para los bienes básicos de alimentación y agricultura. Según un análisis estandarizado del Informe Doing Business 2020 del Banco Mundial, la tasa total de impuestos y contribuciones para una empresa promedio es de aproximadamente el 35% o la ganancia de la empresa, en comparación con el 104% en Argentina (lo que significa que los impuestos pagados en Argentina son ligeramente superiores a la ganancia neta obtenida, para esta empresa estandarizada simulada).

–LN: En comparación a la alta volatilidad del peso argentino y la relativa estabilidad del guaraní y las tasas de cambio, ¿hay beneficios para los inversores extranjeros interesados en establecer sus empresas en Paraguay?

–FS: Si bien el Paraguay aplica un mecanismo reconocido internacionalmente sobre el control de los flujos de capitales para prevenir el lavado de dinero, no existen restricciones a la entrada o salida de capitales, ni a las operaciones de cambio entre monedas locales y extranjeras. A pesar de la publicación de los tipos de cambio referenciales del Banco Central, los tipos de cambio son establecidos libremente por los operadores del mercado. En Paraguay, las cuentas bancarias se pueden mantener de manera equitativa en moneda nacional o extranjera (en general dólares americanos o euros).

En Argentina, existen controles y restricciones relativamente estrictos sobre los flujos de capital, y existen varios tipos de cambio oficiales (hay diferentes tipos de cambio para las operaciones de bolsa, operaciones de cambio de divisas, las exportaciones e importaciones, etc.), además de un tipo de cambio privado no oficial, con el fin de evitar el movimiento no medido del peso argentino a otras monedas más estables.

Según los expertos, estas regulaciones cambiarias son una limitación principal para la agroindustria en Argentina, ya que el dispositivo relacionado con la exportación debe convertirse a moneda local a tasas más bajas que la relación monetaria real. De la misma manera, la remesa de dividendos, en Argentina tiene que enfrentar la necesidad de obtención de divisas, lo que puede ocurrir a tasas distintas a las tasas relacionadas con la exportación.

Paraguay puede ofrecer aranceles de importación reducidos para maquinaria y bienes de capital, además, bajo la Ley 60/90, los fabricantes pueden solicitar una exención fiscal completa sobre los bienes de capital importados. La tasa máxima de importación de maquinaria y equipo de transporte es de alrededor del 28 por ciento (solo se aplica para unos pocos bienes de capital), en comparación con el 35 por ciento en Argentina.

–LN: En cuanto a estabilidad económica, política y tasa de crecimiento anual, ¿se puede afirmar en definitiva que la inversión hecha en Paraguay ofrece mayores ventajas?

–FS: Sí, se puede afirmar esto. No solo nosotros lo afirmamos, pero las estadísticas lo han demostrado en base al flujo positivo de inversores argentinos, brasileños y de varias partes del mundo que han decidido optar por Paraguay como un destino principal de su inversión. Lo afirman los testimonios de los inversores con quienes trabajamos, muchos de los cuales optan por radicar sus inversiones, o ampliarlas, aquí en Paraguay.

–LN: Adquirir tierras con la finalidad de explotarlas para realizar agronegocios, ¿se pueden mencionar ventajas competitivas que ofrece nuestro país a nivel legislativo en comparación al país vecino?

–FS: En Paraguay, los bienes inmuebles rurales pueden ser adquiridos sin restricciones por particulares extranjeros o por empresas de propiedad extranjera, a pesar de una zona de seguridad de 50 kilómetros establecida por la Ley de Seguridad Fronteriza (Ley 2532/05), donde las personas privadas extranjeras y las empresas de países limítrofes (Argentina, Brasil y Bolivia) solo pueden adquirir tierras rurales por autorización, cuando demuestran un beneficio de relevancia pública. No hay limitaciones para los terrenos urbanos o industriales, y para las personas y empresas extranjeras de otros países.

En Argentina existen limitaciones en el porcentaje de bienes inmuebles rurales de propiedad extranjera (Ley 26.737) del 15% de la superficie nacional, provincial y municipal, y este contingente no puede ser utilizado por más del 30% de extranjeros con la misma nacionalidad. Esto significa que la disponibilidad de terrenos rurales para extranjeros debe verificarse caso por caso. Además, hay una limitación de 1.000 hectáreas por parte del propietario extranjero en una zona específica. Sólo hay excepciones para los extranjeros que viven en Argentina por más de 10 años, y para los familiares de argentinos.

–LN: Por último, ¿qué otras ventajas se les pueden mencionar a los extranjeros interesados en invertir en el sector agroindustrial de Paraguay?

–FS: Con una incidencia del 22% en las exportaciones totales de bienes, Paraguay es líder mundial en la participación exportadora relacionada con granos. En Argentina, los productos relacionados con los granos participan con un 5% sobre las exportaciones totales. La importancia de los granos en la estructura exportadora paraguaya se refleja en la infraestructura de transporte orientada a los cultivos disponibles, como puertos especializados y barcazas.

Paraguay es el tercer exportador per cápita de productos relacionados con granos del mundo, mientras que Argentina se ubica en la posición 16. Esto significa que Paraguay figura entre los tres países con mayor excedente per cápita relacionado con los granos, contribuyendo a la nutrición de los países importadores de alimentos. Del mismo modo, Paraguay es el sexto país del mundo con mayor incidencia de exportaciones generales de alimentos, con una incidencia del 65,2% de las exportaciones totales, mientras que Argentina se ubica ligeramente por debajo, con una incidencia exportadora del 64,9%.

Paraguay ofrece condiciones climáticas apropiadas para la producción agrícola, donde hay una variación importante en la temperatura (creciendo de sur a norte) y las precipitaciones (creciendo de norte a sur). Hay un promedio de 7,8 horas de sol por día en Paraguay, en comparación con 6,8 horas en Argentina (atendiendo a las zonas climáticas argentinas altamente diversificadas).