Como todos los años, realizamos alrededor de 446 capacitaciones en buenas prácticas y uso responsable a lo largo de todo el país y alcanzamos las más de 45.000 personas capacitadas. También desarrollamos el concurso Futuros Líderes BPA, destinado a los alumnos de escuelas secundarias técnicas y agrotécnicas de todo el país. La actividad, que fue una gran forma de fomentar y premiar la educación técnica, tuvo 126 proyectos inscriptos y contó con la participación de más de 1.060 alumnos de 17 provincias distintas.
Hemos logrado un liderazgo en seguridad e higiene de los depósitos. Algunos municipios exigen o recomiendan la certificación Casafe para habilitar los depósitos de fitosanitarios. También participamos de la elaboración de la Norma IRAM 38500/20 y estamos trabajando en un programa para depósitos de semillas.
Logramos una mayor participación en la agenda de sustentabilidad. Lanzamos Diálogos Sustentables, un espacio de conversación para conectar a toda la cadena productiva del sector agroindustrial en un tema que es transversal para todos. El primer encuentro se realizó en Entre Ríos y asistieron más de 70 personas. También investigamos y generamos contenidos sobre biodiversidad y sostenibilidad. Estos temas son parte de la preocupación de la sociedad y también de Casafe y no podemos hacer oídos sordos.
Finalmente, trabajamos para cerrar esa grieta que separa al campo de la sociedad. Todo el año intentamos hablar desde la empatía, entendiendo que hay muchas inquietudes y también desconocimiento de cómo se trabaja en el campo. Por ejemplo: lanzamos el informe Casafe es I+D, que muestra todos los aportes de la industria de fitosanitarios a la sociedad y el país. Sin embargo, la diferencia la hicimos a través de las campañas: #LaVerdadDelTomate y #BastaDeMiedos. Con estas iniciativas, le dimos al campo la voz que le faltaba: la de miles de productores y personas vinculadas al sector que expresan quiénes son y cómo trabajan.
Los argentinos tendemos a pensar que es todo es blanco o negro, sin quererlo alimentamos una separación, esa famosa grieta que nadie ve, pero todos sienten. Lo que nosotros realmente queremos, es cambiar esa "o" por una "Y", donde se refuercen y convivan las dos o más miradas que existan. Todos los sistemas productivos son viables y absolutamente complementarios. Tenemos que trabajar para que coexistan y se potencien entre sí y, de hecho, desde Casafe lo estamos haciendo, porque el 75% de nuestras empresas hacen insumos biológicos.
Queda mucho por trabajar. Las inquietudes de la sociedad nos demuestran que debemos construir una agenda de trabajo para comunicarnos con ellos. Hay espacios por cubrir con más información para que no lo cubra el prejuicio y el miedo. Y ese es uno de nuestros desafíos para el 2022.
Por Federico Landgraf, director ejecutivo de Casafe