Las lluvias fueron solo para el SO de la región pampeana
En la última semana pasó algo interesante: “las lluvias abandonaron la tendencia a favorecer la franja este del país y tuvieron una presencia excluyente sobre la franja sudoeste de la región pampeana”, explica Aiello. El consultor Elorriaga precisa: “La Pampa, el extremo sudoeste de Córdoba y el extremo sur de Buenos Aires fueron beneficiados por acumulados de 5 a 40 milímetros”. A partir del lunes 20, la intensa circulación de aire frío desde el extremo sur hacia la zona central del país favoreció el desarrollo de las lluvias. Pero para la región núcleo fue muy poco: los acumulados fueron inferiores a los 10 mm. Bengolea, Córdoba, marcó 8 mm. Por fuera de GEA, en Río Cuarto se acumuló 18 mm. A cada semana se agrava la falta de agua en el centro de la región núcleo y el norte de Córdoba y Santa Fe, junto al norte del país. Tanto Aiello como Elorriaga coinciden en señalar que “sin aportes extra desde el Pacífico y el sur de Brasil, será imperioso que mejoren los mecanismos regionales a fines de septiembre” para que haya una mejora.
Se sembró el 55% del maíz, pero la falta de agua pone en dudas el futuro de la siembra
Las lluvias de los primeros 9 días de septiembre son las que permitieron seguir con la siembra en esta semana: ya se hicieron 935.000 ha con maíz en la región núcleo. El aumento de la desecación superficial del suelo pone en riesgo la concreción de los planes de siembra en el sudeste cordobés, norte bonaerense y sur de Santa Fe. En Marcos Juárez la falta de agua interrumpió las siembras, habiendo avanzado un 75%. “De no tener una lluvia pronto, quedará un 20 % de la superficie planificada sin sembrar”, advierten. En Rojas, se sembró solo el 15% del maíz y la humedad superficial alcanza para pocos días más. “Solo se seguirá sembrando en lotes que tienen cobertura de rastrojos y retienen humedad”, dicen. En San Gregorio, el agua alcanza para algunos lotes más en función del viento, la cobertura y las malezas de cada lote. En el sur de Santa Fe, la zona que menos agua recibió en septiembre, las reservas de humedad en el primer metro están en el mismo nivel que hace un año atrás.
¿Hay un “revival” de la labranza mecánica?
“Se están rompiendo años de (siembra) directa”, señalan los técnicos. El aumento en los costos de producción y la proliferación de malezas resistentes y tolerantes a numerosos principios activos están inclinando la balanza al laboreo de los lotes. "Al aumentar el precio de los insumos y cobrar menos en dólares, el productor se inclina por aumentar la labranza mecánica. Hay que tener también en cuenta que en trigo y maíz el costo de la fertilización representa casi el alquiler", explican en Cañada Rosquín. “La nueva rastra diamante se está usando para algunos lotes”, señalan en Marcos Juárez. Se trata de una labranza superficial, poco agresiva que genera remoción en los primeros centímetros del suelo. En los lotes con alta infestación de malezas “problema” representa una alternativa efectiva y más económica que el uso de herbicidas.
¿Están faltando insumos?
En muchas localidades responden que no, pero en otras que sí. En General Pinto, dicen que se tratan de “insumos muy específicos como herbicidas o fungicidas puntuales”. Algunos técnicos plantean que “la faltante sería temporal y a nivel de algunos distribuidores” y estaría afectando a principios cómo el glifosato o diflufenican y algunos formulados comerciales para control de rama negra y yuyo colorado. Sin embargo, todavía no sería algo palpable a nivel del productor, ya que se estima que “más de la mitad de los productores ya han comprado el grueso de los insumos para la siembra de soja y maíz”.
El trigo necesita más agua para no perder potencial de rinde
Sobre el sudeste cordobés se necesitan entre 100 y 120 mm para alcanzar niveles óptimos de humedad. En Santa Fe se necesitarían alrededor de 60 a 80 mm. Con el avance del trigo hacia las etapas más críticas, los técnicos señalan que “es esencial una nueva lluvia y que no se produzcan heladas tardías para que el cultivo exprese todo su potencial de rinde”. Por ahora, sigue desarrollándose muy bien: un 5% está en excelentes condiciones, un 80% muy bueno y el resto bueno. El frío es la otra preocupación: el trigo entra en etapas más susceptibles a las bajas temperaturas. El 55% de los lotes está en encañazón, 25% despliega la hoja bandera y un 15% tiene la espiga embuchada. En Cañada Rosquín la helada de la semana pasada frenó el desarrollo del cultivo y quemó algunos macollos chicos.
La primavera arrancó con heladas en la región pampeana
El regresó del frio reavivó los malos recuerdos de las heladas pasadas sobre los trigos maduros. En la región núcleo, las temperaturas estuvieron cerca de los cero grados en el norte de Buenos Aires. La mínima del 21 fue de 1,4°C en General Pinto: hubo heladas agronómicas. En principio no habría problemas por la presencia de humedad. En el centro y sur de Buenos Aires, tras 3 días de intenso viento seco del sector sur, las temperaturas fueron inferiores a los cero grados. En Benito Juárez se registró -1,8°C, y en Coronel Pringles -1,0°C