Se espera una gran respuesta del trigo tras las lluvias

Agosto terminó con 300.000 has de trigo en condiciones regulares y la falta de agua recrudecía el temor por alcanzar las pérdidas de rinde del año pasado. Hace un año había pérdidas generalizadas de plantas de un 30%. Pero en cambio, en 2021, se estima que la falta de agua puso un límite de rendimiento solo a 20.000 ha, el 1,2% del trigo sembrado en la región núcleo. En el resto se espera que el cultivo siga en carrera con el potencial casi intacto. Las lluvias de septiembre le darán un gran impulso al cereal y aseguran un en buena parte de la región una base de 30 qq/ha.

¿Cuánto llovió en los primeros días de septiembre?

La región núcleo recibió 32 mm en promedio en los primeros 8 días de septiembre. Para el noroeste bonaerense y el sudeste cordobés son las primeras lluvias que luego de 3 meses superan los 10 mm. Hay un sector del sudeste cordobés que registró acumulados por debajo de los 15 mm, como Canals. A pocos kilómetros, en Noetinger se registraron 64,5 mm. Se destacan las lluvias en el centro sur de Santa Fe: Irigoyen marcó 66 mm y Clason, 65 mm. En el noroeste bonaerense, General Pinto recibió 50 mm y General Villegas, 49 mm. Hacia el noreste de Buenos Aires, Baradero registró 43 mm y Ramallo 37,5 mm. Estas lluvias, que caen en el momento en que la mitad de los lotes están encañando y la otra mitad en macollaje, permitirán restablecer el estado del cultivo y arrancar los estadios definitorios con mejores condiciones.


Tras las tormentas, ya se hablan de promedios de 40 qq/ha

Con el agua que dejaron las tormentas en El Trébol, centro sur de Santa Fe, los macollos están definidos y ya estiman un promedio de 40 qq/ha. Allí, las reservas de agua alcanzan para llegar a floración y llenado de granos. También en Carlos Pellegrini y en Pergamino garantizan buenos resultados gracias a la fertilización aplicada. Al sur de Santa Fe, en Bombal, se estiman entre 35 y 42 qq/ha. En parte de los lotes regulares, el 1,2% de la región, se registró pérdidas de hojas y pérdidas de macollos, y se estiman ya perdidas del potencial de rinde. En Cañada Rosquín esperan que los cuadros desmejorados tengan una base de 30 qq/ha, mientras que los de mejor estado, estén encima de los 40 qq/ha.

En la zona cordobesa, sigue habiendo necesidad de nuevas lluvias. Las reservas de agua del suelo para el trigo se consideran entre escasas a regulares. De todas formas, bajó el estrés que se estaba observando. Ahora hay una pequeña tregua, pero tienen que llegar lluvias acá en más para pasar adecuadamente el periodo más crítico del cultivo.


Lluvias claves también para el maíz: se mantiene la siembra de 1,7 M ha de maíz en la región núcleo

Si fallaban las precipitaciones no se descartaba el pasaje a siembras más tardías. Incluso, la consolidación del evento Niña hacía tambalear las decisiones de siembra del cereal. Las precipitaciones de los primeros días de septiembre aseguran una buena cama de siembra y mantienen el hectareaje intencionado. Apenas el suelo lo permita comenzaran los trabajos de siembra en la región. En Carlos Pellegrini, centro sur de Santa Fe, ya muchos se han largado a sembrar los primeros lotes luego de las lluvias de la semana pasada.