“El mercado de capitales debe dejar de ser un terreno inexplorado por las pymes para convertirse en una herramienta que aporte a la inclusión financiera, un eje central de la agenda de reactivación productiva que hemos puesto en marcha”, sostuvo el ministro de la cartera, Matías Kulfas.

En esta nueva etapa, el FAE Seguros buscará direccionar el respaldo financiero a las pymes pertenecientes a sectores y regiones del país más afectados por la crisis generada por la pandemia de coronavirus. Además, pondrá el foco en aquellas cadenas de valor estratégicas de cara a la etapa de reactivación productiva en todo el país, con un enfoque federal.

“Con el relanzamiento del FAE Seguros buscamos que se posicione como un comprador institucional importante, permitiendo aportar liquidez al mercado y regular tasas”, añadió Kulfas.

El Fondo de Atención Específica adquirirá distintos instrumentos, como la Factura de Crédito Electrónica (FCE), cuya emisión desde este mes será obligatoria para las MiPymes que emitan comprobantes a grandes empresas desde $146.885.

También apuntará al resto de instrumentos pymes, como cheques de pago diferido (avalados o no avalados por una SGR u otro entidad), pagarés, Obligaciones Negociables (ONs) y el ECHEQ, cuyo uso aumentó significativamente en los últimos meses.

A su vez, el Gobierno está avanzando en un Plan Anual de Capacitación de pymes para promover la inclusión financiera en el mercado de capitales.

En ese sentido, el CEO del Mercado Argentino de Valores, Fernando Luciani, indicó que “esta decisión es trascendental” ya que “sin dudas la herramienta permitirá a miles de pymes planificar su desarrollo y crecimiento”.

Y agregó: “Es una política pública que tendrá alto impacto dado que otorga previsibilidad y profundidad al mercado de crédito para pymes, condiciones esenciales para el desarrollo productivo del país”.

El FAE Seguros, dentro del FONDEP, opera en el mercado de capitales enfocado en el segmento pymes a través del MAV. Su fondeo se realiza a través de la emisión de Valores Representativos de Deuda (VRDs), cuyos inversores son compañías de seguros y las superintendencias de Seguros y Riesgos de Trabajo de la Nación.

Según comunicó el Gobierno, ya se han captado fondos por suscripciones de estos VRDs por $1.800 millones, y se espera alcanzar el total del cupo disponible de unos $5.600 millones en los próximos días, cuyo destino directo será la compra de instrumentos pymes.

Fuente: El Economista