Al mismo tiempo agregó que: “Continuar con medidas que restringen en materia impositiva o financiera, y que constituyen políticas aisladas que desalientan la inversión, implica en términos técnicos un serio perjuicio a los pequeños y medianos productores, tratándose de una medida que decididamente afecta a las cooperativas. En este último caso, vale advertir que operan por cuenta y orden de los productores y esto además afecta el normal desenvolvimiento económico de las mismas y el mantenimiento de la cadena de pagos, cuando muchas de ellas tienen otras producciones, como lecheras, ganaderas, de girasol y maíz”.
Tras la reunión de este viernes por la noche, Iannizzotto señaló que: “esta medida no va a funcionar por el bajo precio de la soja, porque hay plena cosecha de trigo y esto perjudica a los pequeños y medianos productores”. A lo que agregó: “El canal de diálogo es para destacar, sin embargo creemos que el Gobierno se ha encerrado en su propuesta de doble tipo de cambio y retenciones, hay que dialogar para buscar una salida favorable y no con medidas restrictivas inconducentes”.
En relación al contexto, Iannizzotto aseveró que: “el dólar está en escalada, los precios de los commodities están bajos, hay un proceso inflacionario evidente, los productores no tienen crédito, el Estado está en crisis”.
“Nuestra negativa viene acompañada de una propuesta concreta, de contenido, que se trata de un Acuerdo para la Inversión Productiva, creemos que esto aporta una salida con más trabajo y producción”, señaló Iannizzotto.
Por su parte, la Unidad de Financiamiento de Coninagro evalúo que: “esta
medida es contraproducente. La gente no vende su producción porque la soja se
vende a razón de 1,40 dólares, y el dólar en el mercado paralelo y formal CCL
(Contado con Liquidación) está por encima de 120, por lo tanto no pueden vender
ahora porque van a pérdida. Estas cosas ya se hicieron en el pasado y no
tuvieron buenos resultados. Una salida tal vez sea tratar de conseguir un
mecanismo entregándole títulos del Banco central con un precio diferente para
poder liquidar”.
En tanto, las Comisiones Asesoras Regionales (CARes) de Coninagro se sumaron al pedido. Desde la CAR Córdoba señalaron que: “hay muchos productores que no están catalogados como PYME. A su vez, el acopio en el campo y en las cooperativas existe pero la realidad marca que el productor va primero cubriendo costos y luego va vendiendo según sus necesidades. Por ello, tener el 20% de la producción para un productor no es especulación, por ejemplo, ¿qué sucede con los granos que son retenidos por los arrendatarios de tierra que el productor debe retenerles? La brecha del dólar cada vez es mas grande entre el dólar oficial y el blue, lo que naturalmente genera un panorama complicado. La capacidad de ahorro en granos es la moneda corriente del productor”. Desde la CAR Santa Fe, agregaron que: “los productores no suelen ser PYME. Esta medida es presionar sobre el manejo administrativo de un productor cuando la brecha del dólar es prácticamente el doble. Cortar o limitar la financiación es desalentar la actividad hacia el futuro”. En tanto, la CAR de Buenos Aires añadió que: “hay malestar. Restringir la financiación es complicar la vida del productor, su capital de trabajo y siembra”. Finalmente, desde Entre Rios agregaron que “nuestra producción ya viene muy limitada en cuanto posibilidades de financiación”.
En resumen, Coninagro desde hace un tiempo trabaja justamente con una propuesta contraria, un financiamiento al sector que produce. El presidente escuchó el mensaje de las cooperativas y productores pero sin duda falta confianza, no comparten la medida porque desalienta el trabajo y el empleo. Se ha escuchado al Ministro Basterra, quien explicó la norma del Banco Central, destacó el resguardo que tiene el productor en plazo fijo valor producto. Por lo tanto se comunicará esto a las bases y se buscará sostener el diálogo para nuevas alternativas. Nuestras cooperativas y productores rechazan esta operatoria. Es algo aislado que no está integrado a un plan. Sin inversión que aliente al productor es difícil confiar en estas medidas.
Fuente: Coninagro